Historias rugbísticas

Casi al final del Inglaterra-Irlanda de hoy. Pub Hogan's de Palma. Media docena de irlandeses frente a la pantalla, y casi una treintena de ingleses algo más allá. Servidor justo en el medio. Parece que va a ganar el mediocre equipo que supuestamente dirige el infame (como entrenador) Johno. Pero entonces llega el ensayo de Bowe que le da la vuelta al marcador. Los irlandeses del pub gritan, eufóricos. Como siempre, dentro de la corrección y el respeto. Pero uno de ellos se disfraza de hooligan futbolero y se gira hacia los ingleses, gritando como un poseso algo así como "¡jódete, Inglaterra, así se juega a rugby!". Todo eso con los brazos en alto y con cada uno de los dos deditos del medio bien estirados. Nunca había visto una escena así en los años que llevo viendo partidos de rugby en pubs irlandeses. El tipejo, parece como si de repente se diera cuenta de la gilipollez que había hecho (o tal vez temeroso de que la marabunta de ingleses le partiera merecidamente la crisma), se gira con rapidez y les vuelve a dar la espalda. Bebe de su pinta como si no hubiera pasado nada. A su pareja le sale una sonrisita nerviosa. Silencio incómodo en el pub; sólo se oye la imponente voz de Eddie Butler en la tele. De repente un inglés (vestido con una camiseta de su selección) se acerca al tipejo y, con una educación envidiable, le dice calmada pero firmemente a la oreja: "oye tío, tómatelo con calma, que esto es rugby. Aquí nos respetamos todos". El irlandés siguió callado e inmóvil, no replicó nada, verbal o físicamente, a la lección de civismo que acababa de recibir.

Secretos del scrum: la 'bajadita'

Vuelvo a dejar otro artículo interesdante que ha aparecido estos días en el periódico Marca. Se trata de un análisis de la manera tan detallista que tienen los argentinos de tratar la melé o scrum, en este caso del truco conocido como 'la bajadita'. El artículo se titula Las cicatrices del rugby argentino: la 'bajadita', y lo firma César Pérez.

Siempre hay alguien más fuerte que tú

Siempre hay alguien más fuerte que tú. O más joven y, por tanto, vigoroso. O más taimado, capaz de pillarte desprevenido, entretenido con tu presa capturada. El rugby no sólo es fuerza, aunque el profesionalismo se haya entregado a un desaforado culto al músculo de hierro.

La escenita de marras puede ser aleccionadora. 'La Roca' Elsom manotea por encima de un ruck. Un adversario, del mismo rango (6), el 'bull' Deon Stegmann, lo reta, se le enfrenta, pero es triturado por el arranque de fuerza del australiano, que tras someter a su rival se centra extáticamente en escrutar su mirada dolorida, como buen depredador. Pero entonces aparece por detrás Victor Matfield para llevarse por delante a la roca que parecía inamovible.

Las victorias siempre son parciales, aplazamientos momentáneos de la derrota que siempre llega, implacable, para descabalgar cualquier voluntad de dominio o pretensión de autonomía.

Simon Danielli: el jugador de rugby filósofo y teólogo

Históricamente no han sido pocos los jugadores de rugby que contaban con alguna carrera académica entre sus méritos. Era lógico si tenemos en cuenta que, al ser un deporte muy vinculado a las universidades, sus practicantes estuvieran inmersos en el estudio de diversas carreras. Hoy en día, sin embargo, a causa de la profesionalización de este deporte, estos casos abundan mucho menos. De acuerdo que no estamos como con el caso del fungol (lleno hasta los topes de incultos y analfabetos), pero las diferencias se van acortando. Aunque hay excepciones, como la que tiene que ver con el caso del ala escocés Simon Danielli, que estudió nada menos que en Oxford (Trinity College), donde consiguió el Segundo Grado de Clase Superior en Filosofía y Teología. El jugador, que está cuajando una gran campaña en las filas de Ulster (como demuestran varios ensayos: uno, dos, tres, cuatro y cinco), y que en sus años universitarios confesó ser "alérgico a las mujeres y a la cerveza", vuelve a la titularidad con Escocia esta semana en el VI Naciones, en partido que juegan frente a Italia en Roma. [entrevista a Danielli]

Los Bulls cogen la iniciativa

Y hablando de festivales ofensivos y hemorragia de ensayos, y sin salirnos del Super 14, hay que hablar de los Bulls de Pretoria, vigentes campeones y principales favoritos de cara al título, que en dos partidos ya han conseguido superar la barrera de los 50 puntos. A pesar de haber perdido fuerza en las alas con la baja de Habana, cuando a los Bulls les entra la vena ofensiva, es decir, cuando el mariscal Du Preez se hace con el mando y el bombardero Morné Steyn afina la puntería de su bota derecha, son realmente imparables, una máquina que arrasa con todo. La única pega hasta el momento tiene que ver con cierta endeblez defensiva, que les lleva a encajar demasiado sobre todo en momentos de relajación, y buena prueba de ello (también de sus festines ofensivos) puede apreciarse en este resumen de la primera jornada, en la que vencieron a los Cheetahs en Bloemfontein (unos Cheetahs que, creo, esta vez sí van a hacer un buen torneo).

¡18 ensayos en el Ellis Park!

Me gusta el Coca Cola Park, antiguo Ellis Park. El de Johannesburgo es de esos estadios (raros ya, con tanta pista de atletismo) en los que se siente al público muy encima del terreno de juego, con una presión asfixiante. La pronunciada vertical de sus graderíos es la causa principal de esa sensación, que hace como si la grada fuera la continuación directa del cesped.

El Ellis Park es mítico, por muchos motivos, el principal por ser el estadio que albergó la final del famoso Mundial de 1995, ahora revivida gracias al dúo Carlin & Eastwood. Sin embargo, en las competiciones de equipos este estadio no puede disfrutar de un buen equipo, porque los Lions son uno de los peores de aquellos que forman parte de la representación sudafricana del Super 14, y tampoco es que sea de los mejores en la Currie Cup. Al menos, y no es poco, puede disfrutar de los rivales, sobre todo cuando estos anotan ensayos con una facilidad pasmosa. Ha sucedido varias veces últimamente. Por ejemplo, este pasado verano fueron masacrados por otros Lions, los representantes del Imperio Británico (10-74), y hoy mismo los neocelandeses de los Chiefs han vuelto a elevar el ensayo a categoría suprema del rugby. Aunque como luego todo se acaba mimetizando, al final los locales se han contagiado y sumado a la fiesta.

La primera parte de este partido de la segunda jornada del Super 14 ha sido engañosa, pues se ha llegado con un marcador muy igualado (25-27). Parecía que el experimento de Spencer & Muir funcionaba, con un juego alegre y buenas combinaciones a la mano, pero ha sido sólo un espejismo. Tras ir ganando 25-17 al minuto 37, más o menos, una serie de arrasadores ataques de los Chiefs han dejado el marcador en un 25-65 al minuto 60. Un parcial de... ¡0-48 en poco más de 20 minutos! El partido resuelto y humillación consumada. Al final los Lions han aprovechado el sin bin de Kahui, y una evidente relajación de los visitantes, para conseguir unos cuantos ensayos y maquillar la paliza. ¡O eso parecía!, porque a lo tonto (eso sí, ya sin Spencer en el campo) los ensayos iban cayendo en la cuenta local y al final incluso han tenido opciones de conseguir la victoria (a falta de 4 minutos, con 14 abajo, y con un ataque que al final fue detenido). El parcial a su favor, en estos últimos 20 minutos de partido, también ha sido de impresión: ¡40-7! Han acabado perdiendo, pero los Lions han mostrado una dignidad espectacular, una capacidad de superación que hay que valorar de cara a la progresión de este torneo. Al final, 65-72, ¡18 ensayos! (una hemorragia en toda regla), y dos bonus (ofensivo y defensivo) para los locales. Hay días en los que perder importa menos que nunca.

Las lesiones en el rugby

Por todos es sabido que la llegada del profesionalismo implicó para el mundo del rugby una importancia decisiva de la preparación física de los jugadores, que cada vez son más musculosos. En consecuencia, las lesiones se multiplican, dada la enorme exigencia de este deporte hoy en día. Dejo aquí el link de un artículo que para Balón Oval ha escrito Luis J. Suárez Arrones, preparador físico del Cajasol Rugby Ciencias, que versa básicamente sobre una de las lesiones mayoritarias en este deporte: las roturas de isquiotibiales.

El rey de las roturas musculares: los isquiotibiales

Bath resurge de sus cenizas

Cuando parecía que incluso podría pasar problemas a la hora de mantener la categoría, Bath ha resurgido de sus cenizas. Una serie de resultados positivos (incluido un partido a muerte con el colista Leeds) los han ido alejando del fondo de la tabla. El último paso de esta escalada se pudo ver el pasado domingo en el Majeski Stadium, donde le propinaron un soberano repaso a los London Irish. Ahora que Bath ha ido recuperando a sus lesionados (James, Mears, Maddock, etc.), de una clase contrastada, y que nuevos como Luke Watson se están asentando, el conjunto de Steve Meehan está mostrando lo que es capaz de hacer. Es una pena que lleve sobre sus espaldas un lastre insuperable de cara a esta temporada, tras un inicio espantoso, pero estoy seguro que, si mantiene este equipo y acaba de recuperar a todas las bajas (Barkley y Lipman), puede ser uno de los favoritos de la próxima Guinness Premiership.

Dejo arriba el ensayo que anotó el prop David Barnes, que es el más listo en un ruck, en el citado partido de este pasado sábado.

A Flannery se le va la olla

Este es el patadón monumental que le infligió Jerry Flannery al joven Palisson este sábado en el Stade de France. La acción está siendo analizada por la IRB y al hooker de Munster, gran jugador, debería caerle una sanción, porque acciones como ésta no tienen defensa alguna.

El infortunio escocés

Lo que le sucede a Escocia es como para ponerse a llorar. Tras el mejor partido que ha realizado desde hace años, y que perdió milagrosamente en el último momento, se suceden los problemas: parece que tres hombres importantes (Thom Evans, Paterson y Rory Lamont) se perderán por lesión lo que queda de torneo. Preocupante sobre todo es el caso del menor de los Evans, que padeció una serie lesión en el cuello cuando fue placado por Byrne.

El entrenador, Andy Robinson, visiblemente contrariado, acusa a Lee Byrne de provocar el decisivo sin bin de Godman. La verdad es que todavía no he podido ver una repetición atenta de la jugada (en la retransmisión de la BBC no la ofrecieron, cosa extraña), pero en vivo lo cierto es que no parece del todo claro que Godman detenga la carrera de Byrne. Godman pega un salto buscando el balón, y no se aprecia que estire la pierna para derribar a Byrne. A ver si aparece una imagen más clara para dejar claro si hubo derribo o, por contra, Byrne emuló a futbolistas estilo Paulo Futre.

PD: qué feos los grititos forofos de Jonathan Davies durante la retransmisión de la BBC. No fue cosa del vibrante final, sino que durante todo el partido Davies perdió la compostura y la objetividad en más de una ocasión.

Francia favorita

Puñetazo en la mesa por parte de Francia, tras la paliza que ayer le infligió al vigente campeón. Y este partido, a diferencia del disputado en Edinburgo la semana pasada, sí que es un partido del que pueden extraerse consecuencias firmes de cara al resultado final del torneo. El duelo de los dos principales favoritos descalabra las aspiraciones de los irlandeses y deja a los de Lievremont con el camino abierto para el título, porque en principio ni Inglaterra ni Gales deberían ser oponentes serios. El 33-10 final deja claro quien manda en este VI Naciones.

Falta saber todavía si a los franceses no les espera de nuevo una reedición de sus habituales recaídas bipolares, pero parece que el proyecto de Lievremont coge forma y sobre todo fuerza. El partido era decisivo, y los franceses no fallaron, dando una lección de efectividad y seriedad, al más puro estilo Springbok. Únicamente el line-out se les resistió, sobre todo en la primera parte, pero en cada jugada daban la impresión de saber exactamente lo que debían hacer para salirse con la suya. Rocosos y fuertes, nunca se dejaron sorprender por los erráticos y previsibles irlandeses. Tras las primeras acometidas por parte de los visitantes, que llevaron la iniciativa durante los primeros minutos del partido, Francia desplegó una defensa (dirigida por el imperial Dusautoir) implacable que derrumbó todos y cada uno de los ataques. El desastroso juego a la mano de los de Kidney, demasiado precipitados, facilitó más las cosas a los locales. O'Driscoll, el buque insignia, apenas apareció. Los primeros ensayos cayeron al contrataque, aprovechando muy bien los errores contrarios (el sin bin de Healey), pero ya en la segunda parte, con una buena ventaja a su favor, el dominio francés fue más directo. Irlanda tuvo opciones al final de la primera, con un ensayo en puertas, pero la defensa de acero francesa doblegó a los verdes. Señalar el buen partido de Parra, que hasta se soltó con un gran drop, también que el apertura Trinh-Duc al fin consiguió un partido regular, y que Harinordoquy fue de nuevo un bastión insuperable en la tercera línea. Lo dicho: si no regresan sus devaneos esquizofrñenicos, Francia apunta a llevarse el torneo.

El milagro del Millenium Stadium

Que los milagros existen ha quedado claro esta tarde en Cardiff, aunque no siempre vayan en la misma dirección que la justicia. Porque en el Millenium Stadium se han conjugado lo dos términos: milagro injusto. Gales no merecía ganar y Escocia no merecía perder. Así de simple. Pero diversas circunstancias encadenadas, como las lesiones de T. Evans y Paterson (éste el día de su internacionalidad nº 100), dos expulsiones seguidas (Lawson y Godman), junto con los habituales 10-20 minutos en los que Gales saca a pasear su talento (que en este caso han coincidido con el hundimiento final escocés), han permitido un parcial favorable a los locales de 17-0 en los últimos 7 minutos que han conseguido consumado el milagro (31-24). Pero la realidad es que han ganado un partido que nunca merecieron, sobre todo en la primera parte (a la que se llegó con 9-18), donde fueron triturados minuciosamente en todas las esferas del juego por los caledonios, que esta vez sí han demostrado que pueden jugar a rugby con una solvencia importante. El domingo pasado en Murrayfield dieron pena, pero hoy han estado grandiosos. La clave del cambio de cara de los escoceses hay que buscarlo sobre todo (también que volvían Murray y R. Lamont) en que hoy sí jugaba un fly-half de garantías, el gran Dan Parks, que ha dirigido brillantemente el ataque de los suyos para conseguir dos ensayos en la primera fase del partido. Increíble: Escocia anotando ensayos y por partida doble. Parks ha sido nombrado merecidamente Man of the match, reconociéndose el gran partido que ha disputado, sirviendo el ensayo a Max Evans y anotando dos drops (uno sensacional, casi desde el centro del campo). Lo increíble es que este hombre no haya jugado un solo partido con su selección desde hacía 13 meses, viendo como su puesto era usurpado por el mediocre Godman. ¿Alguien entiende un delirio semejante? A diferencia de la anterior jornada, sólo hoy, con Parks al mando, han demostrado los escoceses que pueden decir cosas en el torneo y dejar de ser las comparsas que han sido estos últimos años.

Además de Parks, hay que destacar que Cusiter hoy sí ha estado más inspirado, lo que sumado al partidazo de Barclay, que estaba en todas partes (además de anotar el primer ensayo del partido), el talento de los hermanos Lamont o la fuerza del 'renacido' Murray, ha permitido a los escoceses alcanzar un nivel de juego remarcable. Se notaba físicamente que Andy Robinson, en la grada, estaba muy contento con lo que veía sobre el cesped. Por contra, Gales era hasta la media parte un cadáver, un proyecto finiquitado. Nadie llevaba la iniciativa, nadie buscaba la línea de 22 contraria, lo poco que se intentaba salía mal. Se preveía una hecatombe de consecuencias serias (¿cese de Gatland?). La cara de Gatland & co. en la grada era fúnebre. Pero el milagro comenzó a mascarse ya en la primera parte, con las lesiones de hombres importantes de Escocia, como T. Evans y Paterson. La falta de efectivos obligó a jugar a Blair de ala. Luego se añadieron las expulsiones, que dejaron a los visitantes con 13 sobre el campo en el tramo decisivo. Escocia se aferraba a la épica, con un colchón de 10 puntos. Pero Gales, desastrosa todo el partido, con una cantidad de errores impresionantes, de repente sacó el gran talento del que dispone, personificado sobre todo en sus dos eléctricos alas, Shane y Halfpenny, para llevarse un partido increíble. Los últimos 3 minutos, por ejemplo, han sido de los más vibrantes y asombrosos que he visto en mucho tiempo. Sólo una furia casi divina ha podido doblegar hoy a los enormes y colosales escoceses. Una pena.

Inicio del último Super 14

Esta misma mañana se ha iniciado la última edición del Super 14 (el año que viene será Super 15, tras la inclusión en el torneo de los Melbourne Rebels), tal vez el torneo de equipos con más nivel del rugby mundial. Dejo el análisis que, por países, ha realizado para Balón Oval Aitor Moragas-Sesenta y Cuatro, experto en rugby del hemisferio sur: Nueva Zelanda, Australia y Sudáfrica.

Dan Parks al rescate

La desastrosa imagen ofrecida este sábado por Phil Godman ha obligado a Andy Robinson a rescatar del fondo del banquillo al apertura de origen australiano Dan Parks. Nada menos que 13 meses ha durado la penitencia impuesta a Parks, que desde noviembre del 2008 no viste la zamarra caledonia. Aun teniendo en cuenta sus limitaciones, creo que nadie puede dudar de que Parks es un jugador con una clase muy superior a la de Godman. Desde luego, y para empezar, en el juego de pie (dinámico o estático) son la noche y el día. Lo cierto es que no entiendo que tras el Mundial de 2007, en el que jugó a gran nivel, primero Hadden y después Robinson se dedicaran a ningunear a Parks para promocionar al mediocre Godman. Buena decisión, por tanto, la de dar otra oportunidad al apertura de los Glasgow Warriors, aunque seguramente eso no baste para que Escocia se convierta en lo que no ha sido desde hace ya demasiado tiempo: un equipo ganador. En el caso de que Robinson esté trabajando un cambio de estilo, más ofensivo que en la etapa de Hadden, los resultados de momento están muy lejos de resultar satisfactorios. Escocia sigue siendo un desastre a nivel ofensivo. A ver si la entrada de Rory Lamont en el 15 titular puede ayudar también a mejorar algo las cosas. También vuelve el religioso Euan Murray (esta vez no juegan en domingo), y Jim Hamilton (que también vuelve tras mucho tiempo fuera de la selección, aunque en su caso el motivo tenga que ver con una lesión) sustituye al lesionado Hines.

Escocia no se mueve

Lamentándolo mucho, Escocia no se ha movido un milímetro de donde estaba con Frank Hadden. Las esperanzas despertadas por la llegada al banquillo de Andy Robinson, sobre todo tras sus partidos ante Fiji y Australia en noviembre, no están fructificando en absoluto. La derrota en Murrayfield ante una diezmada Argentina fue el preludio del mal partido de ayer, 9-18, ante una Francia que sólo tuvo que apretar en la primera parte para llevarse la victoria con total comodidad. Escocia sigue enfangada en los errores de siempre: una incapacidad desesperante para conseguir ensayos (sólo con el pie infalible de Paterson no se pueden ganar muchos partidos), poca movilidad de sus tres cuartos, rácano juego a la contra, etc. Ayer, para colmo, no les funcionó la melé (que contaba con la baja de Murray, cristiano renacido que no juega los domingos), destruida por el poderosísimo paquete francés, y en ocasiones (en la segunda parte) tampoco el line out. Desaparecido Cusiter, ausente Morrison, superada la melé, con los Evans en el limbo y un Godman realmente desastroso (sigo sin entender cómo es titular este hombre por delante de Parks y Jackson), sólo dieron la cara Beattie y Sean Lamont, los únicos que crearon problemas a la línea defensiva francesa. Así no se va a ninguna parte. Siento tener que decir esto, pero creo que al final la culpa de tantas decepciones no era totalmente atribuible a Hadden; simplemente, esta generación escocesa no da para más.

Los franceses bien aunque, como he dicho, se limitaron a apretar en la primera parte para sentenciar el choque. Con su juego rápido y vistoso que los ha hecho grandes, con un redimido Bastareaud, con Harinordoquy poderosísimo (Man of the match para la BBC), encerrraron a los caledonios en su campo (el dominio territorial visitante, del orden del 70 %, dice mucho de la dinámica del partido), destrozándolos con su juego a la mano y sus poderosas llegadas de la caballería. Dieron buena imagen los de Lievremont, aunque de sus convocados-sorpresa sólo jugó de titular Fall, al que no se le vio el pelo en todo el partido.

La caverna mediática: Kidney marca drops

Para mí, la 'caverna mediática' es aquella que en nuestro inenarrable país parece sólo vivir del fungol, y no sólo en las páginas deportivas. Una nueva muestra ayer, en El Mundo. Por un día que hablan de rugby (reportaje sobre BOD), y lo titulan 'Con la inspiración de Mark Hughes', además cagándola en dos datos (¡Declan Kidney marca drops!, y BOD consigue los dos ensayos de Irlanda en el Millenium Stadium, otorgándole el que fue obra de Bowe) y metiendo, ¡como siempre!, la manida cuña del fungol donde sea y como sea. Hablan de BOD, pero titulan el artículo con el nombre de un fungolista galés (y creo que ahora entrenador), para hablar largo y tendido de lo mucho que admira BOD al ex-jugador del Barça. Como esa impresentable periodista de Teledeporte que, en un acto de promoción de Invictus, tras una primera y evidente cuestión sobre Mandela, se olvida del rugby para preguntar a Carlin por... ¡su afición al Barça de Guardiola!

Inglaterra es menos mala que Gales

Lo mejor: los 100 años de Twickenham acogiendo rugby, motivo por el cual los locales lucieron un anacrónico y centenario vestuario. Lo malo: que ninguna de las dos selecciones convence, en absoluto. Ninguna parece tener las ideas claras en cuanto a lo que busca y a lo que es. Eso sí, en este partido Inglaterra demostró ser más efectiva (que no brillante), aprovechando una serie de circunstancias puntuales para llevarse su primera victoria del torneo. Cuando Gales se quedó con uno menos (estúpida infracción de Wyn Jones), Inglaterra apretó el acelerador para anotar dos ensayos, decisivos a la postre, y Haskell, ya al final, se aprovechó de un error de manos de Stephen Jones (desastroso con la mano, perfecto con el pie. Lo contrario exactamente que Hook).

Johnson y Gatland son y deben ser cuestionados, por lo que decía de que no dirigen con fiabilidad a su equipo, y además toman decisiones discutibles. Por ejemplo, Johnson, que es incapaz de darle una oportunidad a uno de los mejores jugadores actuales de la Guinness, Ben Foden, y prefiere a un Armitage que si bien es muy bueno ahora mismo no está en su mejor momento (acaba de volver de una lesión y se le nota. Ayer no dio una a derechas, salvo en la jugada del robo del tercer ensayo). Tampoco acertó con Wilson de 3, pues en cada scrum evidenciaba unas carencias alarmantes (Dan Cole, que es algo más joven que Wilson y mucho mejor, no puede quedarse más de medio partido en el banco). Otro, Gatland, que no se atreve a dar la titularidad al debutante Richie Rees, intentando amarrar con el veterano pero fuera de forma Gareth Cooper. Resultado: Gales inoperante hasta que Rees cogió la manija para despertar a los suyos en un empuje final remarcable y que los dejó en la orilla.

Inglaterra sigue gris y sin aprovechar el talento de sus tres cuartos, especialmente de sus alas, que apenas entran en juego. Wilkinson, como siempre, fue el mejor, infalible con el pie (15 puntos de 15 posibles), y Haskell despertó una insospechada voracidad anotadora con dos ensayos. Care mostró su mejor cara, la que controla positivamente sus arranques de fogosidad, y Borthwick mantuvo un buen nivel en los line outs. Del resto, poca cosa que decir. Gales, por su parte, puede estar preocupada. Guscott tenía razón durante la semana: los galeses tienen un serio problema psicológico, se les ve agarrotados, sin confianza en sí mismos. En el partido de ayer se echó en falta la participación de Shane Williams y de Lee Byrne, jugadores teóricamente decisivos de cara al éxito de su selección.

George Smith abandona a los Wallabies

Muy sorprendido me ha dejado la noticia de que el gran George Smith, uno de los mejores flankers de la última década, se retira de la selección australiana. Tras esta edición del Super 14 (que se inicia la semana que viene), en la que jugará con sus Brumbies, parece que buscará una experiencia en Europa. Llama la atención que se retire justamente ahora, cuando sólo queda año y medio para el próximo Mundial, para el que Smith no llegaría a una edad demasiado elevada (31 años. Ahora tiene 29). Este pasado Tri Nations superó el centenar de partidos con los Wallabies (se ha quedado en 110), y en principio parecía un jugador importante en el esquema de Robbie Deans de cara al Mundial de Nueva Zelanda. La marejadilla interna que vivió la selección este verano, con un Deans cada vez más cabreado con una serie de jugadores (Tuqiri se fue a la calle, a Giteau no le dan la capitanía, etc.), puede que haya tenido que ver en la resolución de Smith. Hay que tener en cuenta que estos pasados tests de noviembre Smith fue suplente en algunos de ellos, en beneficio de Rocky Elsom (actual hombre fuerte de Deans, que para algo le ha dado la capitanía) y de la gran promesa James Pocock, un placador portentoso (la nueva jerarquía se evidenció en el último de estos tests, contra Gales, en el que Pocock fue titular. De hecho, ha sido el último partido de Smith con la zamarra amarilla). Smith está a buen nivel, tiene todavía una buena edad, pero algo debe fallar en sus relaciones con Deans para que, justo ahora, tome esta decisión tan drástica.

Dejo arriba una selección de sus intervenciones en el partido del último Tri Nations (el primero, frente a Nueva Zelanda) en el que alcanzó los 100 partidos con Australia.

VI Naciones: promoción BBC

Dejo AQUÍ una entrada que escribí para el blog HORRACH sobre los anuncios promocionales del VI naciones en la BBC.

Los mejores ensayos del VI Naciones (en el 2009)

He aquí algunos de los mejores ensayos que se realizaron en la pasada edición del VI Naciones. La clasificación es la misma que una que realizó la BBC, con un único cambio: el ensayo de O'Driscoll a Francia pasa del puesto 10 al 3 (decisión que comparto).

Los mejores ensayos del VI Naciones

Siguiendo con los preparativos emocionales de cara al inicio del VI Naciones, he encontrado este video en el que se ofrecen algunos de los mejores ensayos que se han conseguido en este torneo, incluidas las ediciones anteriores a la entrada de Italia en el mismo (entrada, ya que estamos, que siempre he considerado equivocada. Italia me sobra en este torneo, lo desluce, y no lo digo teniendo en cuenta la parte deportiva (que, bien mirado, también), sino otras cosas. En Italia no se da el espíritu rugbístico de los otros 5 países o naciones, ni se perciben en su ambiente las mismas sensaciones; es otro planeta. Por eso nunca veo los partidos que de este torneo se disputan en tierras italianas). Incluye ensayos de Rory Underwood (con narración de La Voz del Rugby), O'Driscoll, Mauro Bergamasco, Jim Calder, Phil Bennett, o el fascinante de Saint André macerado por Didier Camberabero en Twickenham.

VI Naciones 2009

Cuando ya sólo quedan unos pocos días para que Irlanda e Italia den inicio al VI Naciones 2010, dejo este video en el que se recopilan algunos buenos momentos del torneo en la última edición.