martes, 31 de agosto de 2010

Historia del rugby (10)



Tras un cierto parón, vuelve a Rugby Dump su historia del rugby, con la entrega número 10. El video está dedicado casi en su totalidad a la exitosa (y violenta) gira de los British Lions en Sudáfrica, en 1974, de donde salieron invictos tras 22 partidos, incluyendo tres victorias y un empate frente a los Springboks. La base de ese seleccionado estaba formado por las mejores bazas del mítico Gales de los 70, y es precisamente con ellos que continúa el video, concretamente con los V Naciones conseguidos en 1975 y 1976 (éste último con Grand Slam). Para acabar, la Francia que consiguió su Grand Chelem de 1977 jugando los 4 partidos con el mismo 15 inicial, caso único en la larga historia de este torneo, y el inicio de otro tour de los British Lions, éste por tierras neocelandesas, donde las cosas no salieron tan bien como tres años antes.

domingo, 29 de agosto de 2010

Tri Nations 2010. Séptimo asalto: los Springboks escapan al abismo



De un partido caótico y delirante (44-31) tal vez no se puedan sacar conclusiones muy fiables, pero creo que en esta ocasión dos cosas pueden darse por buenas con un mínimo de fiabilidad: una, que a los Springboks no se les da mal jugar con fuego y tontear con el desastre; y segundo, que los Wallabies han vuelto a demostrar, y puede que sea ésta la definitiva, que de ninguna manera pueden ser un equipo ganador. En el primer caso, señalar que los Springboks tardaron 20 minutos en darse cuenta de lo que se jugaban en este partido (con 7-21 en el marcador en el minuto 9, uno de los inicios más desastrosos que recuerdo, llegué a pensar que querían crucificar a su entrenador), regalando a sus rivales una ventaja amplia fruto de errores increíbles. Dieron pena los locales en esos minutos estrambóticos en los que su defensa había abdicado totalmente de sus funciones, dejando unos pasillos como autopistas para que se colaran las balas australianas. Las caras de PdV y Muir en la 'pecera' (también de los aficionados a los que enfocaba la cámara de Sky) eran muy significativas de lo que estaba pasando: se mascaba un desastre de proporciones muy serias, el fin de un ciclo.

Pero entonces, el desastre cambió de bando, la metamorfosis se realizó de forma espectacular, y la guillotina dejó de hacer caso a PdV para centrarse en Robbie Deans. Parece como si el hecho de ver el abismo tan cerca espoleara a los Springboks, que sólo entonces sacaron a pasear unas auténticas ansias de triunfo y una furia notable. Liderados por un sorprendente y mayestático François Hougaard (un tipo al que todo le salió bien, llegando a parecer una mezcla de Du Preez, Campese y Dallaglio), dieron la vuelta al marcador con un ardor guerrero que ya quisieran otros para sí. Parece increíble que el mismo equipo que estaba siendo arrasado y humillado durante los 10 primeros minutos de partido ejerciera un dominio tan férreo en el resto. Tras su segundo ensayo de la tarde, el de Steenkamp, adquirieron súbitamente una estabilidad mental tan rocosa que los convirtió en los únicos vencedores posibles del encuentro (al menos ésa era la sensación que yo tenía). Sobre todo en la segunda parte, quedó claro que Sudáfrica, a pesar de su errática dirección técnica, tiene en conjunto la mejor plantilla del mundo del rugby, y que Australia, tras la retirada de Larkham y Gregan, ha perdido completamente ese gen competitivo que lo convirtió durante muchos años en un equipo que definió cánones. Los jugadores de Deans son buenos, incluso alguno muy bueno, pero les falta algo que a los sudafricanos o a los neocelandeses les sobra: espíritu de vencedor. Sólo así se explica que los australianos se dejen vencer, partido tras partido, desperdiciando oportunidades únicas para dejar huella. Ya fue su tónica el año pasado (tanto en el Tri Nations como en los tests de otoño), pero este 2010 siguen en la misma línea: dejaron escapar una victoria que podría haber sido decisiva en Nueva Zelanda, y ayer volvieron a las andadas, dejándose el prestigio y la dignidad en el Loftus Versfeld. En realidad no merecieron ganar, porque sus ensayos, salvo el segundo, iniciado por una jugada maravillosa de Beale, vinieron propiciados por los desastres defensivos que cometieron los Springboks durante su monumental caraja inicial (los locales encajaron nada menos que 3 ensayos en 9 minutos). Luego, cuando su ventaja (de 14 puntos) desapareció y no tenían más remedio que atacar para ganar, evidenciaron sus carencias, tanto rugbísticas (con especial relevancia en un set piece muy deficiente espantoso y una habilidad pasmosa para desaprovechar ocasiones claras de ensayo) como psicológicas. Australia es un equipo que, ahora mismo, es incapaz de ganar nada: ni la Bledisloe, ni el Tri Nations, ni mucho menos el Mundial. Por mucho que lo entrene el que ha sido estos últimos años el mejor entrenador del mundo. Simplemente son unos perdedores a los que unos Springboks tocados de muerte y sin entrenador, pueden doblegar a su antojo.

Para acabar, recordar que este partido significó el cap número 100 de Victor Matfield, además del 101 para John Smith. Ambos son ya auténticos mitos de este deporte, aunque lo mejor para ellos sería que tras el torneo se tomaran unas vacaciones anticipadas (es decir, que no viajaran a Europa para los tests de noviembre). Se les nota muy cansados (sobre todo Smit) y si quieren llegar en condiciones al Mundial deberían descansar un poco. El partido también significó la vuelta de Frans Steyn, quien pasó de jugar una invisible primera parte a una más consistente segunda, donde consiguió un ensayo y un penalty de los suyos (o sea, muy lejano). En cualquier caso, se nota que se encuentra en el inicio de su temporada, es decir, bajo de forma, tras el parón veraniego, y que enfrentarse a gente que lleva en marcha desde enero le complicó mucho las cosas.

sábado, 28 de agosto de 2010

La dignidad del rugy: la historia de Paco Méndez

Paco Méndez es el cuarto por la izquierda en la fila superior (1984)

Que el rugby es un deporte en el que la dignidad y el respeto son elementos indispensables que se valoran como en ningún otro sitio (aunque cada vez menos...), da fe de una manera prodigiosa lo que explicó ayer Ramón Trecet y que Phil Blakeway ha ampliado en su nuevo blog rugbístico, Tornarugby. Se trata del caso del segunda línea español Paco Méndez, capitán de Cisneros e internacional con la selección española. Dejo que narre su historia el propio Trecet:

"14:11cet.- Voy andando por la calle Ferraz y de pronto me encuentro con Paco Méndez... Nos damos un abrazo y y me comenta:"Sabes? Aquello que escribiste me lo ha recordado mucha gente". Me cuenta que se está cambiando de casa y me da una tarjeta de su empresa, que se llama MacGuffin... Cáspita, córcholis, como los Mc Guffin de las pelis de serie negra años 40 o las novelas de Raymond Chandler o las pelis de Hitchcock, el McGuffin era algo inexplicable que suele contar tan bien Fernando Trueba cuando se suelta sus rollos sobre dios Billy Wilder... Bueno, pues Paco Méndez... Quedamos en vernos en cuanto acabe su traslado y matarnos a cervezas come il faut... Estoy esperando a mi mujer en una esquina y me pongo a pensar en la historia... Todavía me emociona, Antes deciros que Paco Méndez está tan fuerte como corresponde a un segunda línea y que la historia es una de las más hermosas que haya vivido en mis años en esto del deporte: Central de la Universidad Complutense, juega el Colegio Mayor Ximénez de Cisneros el último partido de liga, creo recordar que contra el Ciencias de Sevilla. El que gane, gana la liga. Lo repito, el que gane, gana la liga de Division de Honor del rugby español. Paco Méndez es el capitán del Colegio(hay 'el colegio' y 'la escuela', Cisneros y Arquitectura, respectivamente) y se lleva todas las touches, como es natural. El partido es de una insoportable tensión. En un momento determinado, los seguidores del Colegio, que solo tienen que cruzar la calle que separa el campo del propio centro universitario, comienzan a pitar las acciones del equipo contrario. La cosa va in crescendo y sube la tensión. Estamos en el segundo tiempo y aquello no se decide. Touche a la altura de la linea de diez metros, campo de ataque del Colegio, lateral del bar. Acude a sacar el talonador del otro equipo, que se lleva una silbatina monumental, al par que una serie de insultos. Se alinean ambas delanteras, llega Paco, se pone en su sitió. oye los silbidos e insultos y sale del alineamiento, le pide al árbitro que pare un momento ante el asombro de todo el mundo, sale del campo camino de la grada y dice más o menos lo siguiente: "SI VAMOS A GANAR ASI, PREFIERO QUE PERDAMOS" luego les conmina a animar al equipo o a callarse, pero no a meterse con el equipo contrario. Se vuelve a su posición, el árbitro pita y sigue el partido. Yo me voy al bar, pido un café y me quedo atolandradamente pensando que acabo de ver un grandioso acto de caballerosidad deportiva tras el cual, como no es un deporte mediáticamente muy seguido, como si no hubiese pasado nada. Meses más tarde estoy comiendo en un sitio de Aravaca que frecuenta el entonces Secretario de Estado para el Deporte Cortés Elvira y en la sobremesa nos ponemos a charlar unos minutos. Le cuento lo de Paco Méndez y me dice que si lo hubiera sabido a tiempo, le habrian otorgado el Premio al Acto Deportivo del Año. Cuando vuelvo a casa, recuerdo un partido contra Inglaterra B en Londres pero no en Twickenham, en el que un rival le partió un pómulo a Paco Méndez, que luego de ser curado me dijo algo así como "gajes del oficio". Yo estaba allí porque al dia siguiente tenía un Gales-Francia del Cinco Naciones, ensayo de Rodriguez.

Paco Méndez... Si mi hijo hubiese jugado al rugby, yo hubiera querido que fuese como Paco Méndez. No como Berbizier, Tana Umaga, Will Carling, Brad Thorn, sino como Paco Méndez. Claro que iré a tormarme unas cervezas con él, porque representa todo lo que amo del deporte, todo lo que es noble en el mundo del deporte. Aquel gesto del Central, me acompañará siempre. Y si creeis lo mismo, mandarle un saludo. Su web, MACGUFFIN.ES".

viernes, 27 de agosto de 2010

¿Apertura, inside back, pivot o five-eight?

Interesante artículo de Aitor Moragas (alias 64) en Balón Oval que trata la distinta terminología (que implica también distintas funciones) que se utiliza en Australia y sobre todo Nueva Zelanda para referirse a los tres cuartos. Su título: ¿Apertura, inside back, pivot o five-eight?

jueves, 26 de agosto de 2010

Sobre Peter de Villiers


Guiñol de Peter de Villiers en la tv sudafricana

Estos días en el foro de Balón Oval algunos hemos estado hablando sobre Peter de Villiers, la mayoría mal (yo incluido) y sólo 'Sesenta y cuatro' como abogado defensor. Dejo aquí una síntesis de lo que he dicho (los comentarios completos, aquí), que es a la vez un balance de este mal año para los Springboks.

"PdV ha tenido vetado a Frans Steyn, y el año pasado no contaba con ninguno de los dos Steyn, ni con Fourie, ni con Brüssow. Todos ellos, clave en el triunfo del Tri Nations, se tuvieron que ganar la titularidad gracias a las lesiones de los titulares de PdV: Jacobs, Jantjes, Smith, etc. Luego lleva tiempo reivindicando a auténticos paquetes, como Ralepelle (¡del que llegó a decir que le parecía el mejor hooker posible para los Springboks!) o el mismo Earl Rose, su proyecto de megaestrella (“el Tiger Woods del rugby”, decía este cráneo privilegiado) que se ha acabado estrellando, quedando incluso fuera de los Golden Lions, un equipo ya de por sí bastante malo. Tampoco me parece de recibo que persista con un lock del montón, como Flip van der Merwe, teniendo a un tipo mucho más interesante, como es Alistair Hargreaves. En fin, que el éxito del 2009 me parece que se consiguió ‘a pesar de PdV’, no gracias a él (y no lo digo sólo yo, sino varios analistas de rugby sudafricano, que hablan de una ‘autogestión’ de los jefes del vestuario durante ese 2009). El año pasado se pudieron escamotear estas cosas, pero la desintegración del equipo es evidente, y peligrosa si se deja que se prolongue. Lo mejor sería que los Wallabies les ganaran los dos partidos que les quedan para que se puede salvar algo de cara al año que viene.

Jake White: también tiene sus sombras, pero lo que dices es injusto [le contesto a 64], porque White se encontró en el 2004 a un equipo destruido tras el mundial del 2003 y lo tuvo que ir modelando año a año, partido a partido. En esas dinámicas es más fácil que le pase lo que le sucedió (la paliza de Brisbane, por ejemplo), porque el equipo se va haciendo de manera muy dificultosa y compleja. En cambio, PdV se encontró con el trabajo hecho: un equipazo, un grupo ya estructurado por White, con unos tipos que habían dado a Sudáfrica su primer campeonato mundial ‘limpio’. Son casos muy diferentes. White construyó casi de la nada un equipo campeón, una máquina dura y eficiente, mientras que PdV no ha aportado apenas nada nuevo, sino que se ha ido cargando ese legado. La federación quiso que fuera PdV el que sacara rendimiento al legado de White, y sólo lo ha conseguido en parte.

A Frans Steyn, con sólo 19 añitos se lo llevó Jake White a la selección, y con 20 al mundial, donde fue titular (es cierto que por lesión de Jean de Villiers, pero éste llevaba más años de rodaje y es lógico que fuera por delante de Steyn en la carrera por la titularidad). En cambio, con quien comenzó a ‘chupar banquillo’ fue con PdV en 2008, donde no había manera de que le diera minutos. El año pasado se repetía la tónica, y si acabó poniéndolo de fullback (si no recuerdo mal, en el tercer partido de la serie con los Lions) fue porque era la única posición que estaba libre (tras la retirada de Montgomery, la lesión de Jantjes y lo verde que estaba Kirchner). Llegó de rebote a la titularidad, aunque cuajó un Tri Nations espectacular. Sin embargo, PdV no estaba por la labor de volverlo a convocar este 2010 (basta echar un vistazo a la prensa sudafricana para saber que PdV y Frans Steyn mantienen una relación poco amistosa), y lo dejó fuera del Tri Nations cuando en cambio sí llamó a otros ‘europeos’ como Butch James y BJ Botha (aunque a James apenas le haya dado minutos. Para eso, mejor que se quedara en Bath). Si ahora lo ha vuelto a llamar es debido a la presión sufrida tras las 3 primeras derrotas del actual Tri Nations, que es cuando la prensa sudafricana comenzó a bombardear sobre la no convocatoria de un jugador tan decisivo (lo he dicho varias veces, pero insistiré: es como si Graham Henry dejara fuera de la selección a Mils Muliaina). ¡Y la leche es que lo llame justo cuando no ha hecho pretemporada y anda lesionado! Todo mal y fuera de tiempo, el signo distintivo de PdV.

Me parece interesante la propuesta de poner a Morné Steyn de 15 y Pienaar de 10. A mí me encanta Ruan Pienaar, tanto de 9 como de 10, y pensé que fue una buena idea promocionarlo para el puesto de apertura tras la marcha de Butch James a Europa. Pero es cierto que en la gira ante los Lions y en su primer partido del Tri Nations no estuvo tan fino como en los tests de noviembre del 2008 (donde cuajó su mejor partido, en la masacre de Twickenham). Y dado que en ese momento Morné se salía con los Bulls en el Super 14 lo lógico era poner a Morné en ese momento, y además la cosa funcionó. Y, ojo: Morné es más malo que Pienaar en el juego a la mano y en muchas más facetas del juego (con el pie, en cambio, es la mejor baza que tiene Sudáfrica), pero su trabajo el año pasado no tiene que ver con lo de este 2010. Será por la baja de Du Preez, es posible, pero Morné estuvo el año pasado más activo y eficiente en el juego a la mano, e incluso consiguió algún ensayo. Pero, Jordi, las decisiones técnicas no pueden ser eternas, sino que responden a las circunstancias del momento: si Morné estaba mejor que Pienaar en junio-julio del 2009, lo lógico era que Morné fuera el titular. Y si lo que sucede este verano es que Pienaar está mejor que Morné, la titularidad se le debería haber concedido al nuevo jugador de Ulster. Así de simple: un criterio contingente y pragmático, que juegue el que mejor está en ese momento. Y ese criterio NO lo respeta PdV ni por asomo, porque si tenemos claro que Pienaar es muy buen 10 y un grandísimo 9, no cuadra que el sustituto de Du Preez haya sido de inicio el acabado Ricky Januarie. Cuando PdV se decidió a poner a Pienaar de 9 (en la segunda parte de la segunda derrota ante Nueva Zelanda), el cambio se notó para bien, aunque poco después llegó la lesión de Ruan y todo se volvió a joder.

Ralepelle: un hooker suplente en su equipo y que apenas juega, tanto en su club como en la misma selección. Y pensemos, para colmo, que llevarse a Ralepelle ha significado que se quedaran en casa hookers de la talla de Gary Botha, Bismarck Du Plessis (plenamente recuperado de su lesión, PdV no lo quiere llamar), Tian Liebenberg, Schalk Brits o Adriaan Strauss.

PdV no es el único responsable de todo. Pensar que en algún ámbito es una única persona la responsable del desaguisado es propio de imbéciles. Pero mucha culpa tiene, aunque gran parte de ella también les toca a los que lo pusieron en el cargo tras cargarse al entrenador que llevó a Sudáfrica al éxito mundial. Lo lógico habría sido dejar que fuera White el que gestionara el equipazo que había tardado 4 complicados años en poner en marcha. Pero no quisieron, preferían que fuera un entrenador negro el que se pusiera las medallas. Pero si lo que se pretendía era eso, poner al primer entrenador negro de la historia de los Springboks, podrían haber escogido a alguien mucho mejor, el gran Alister Coetzee. Pero, claro, Coetzee es negro… pero amigo y colaborador de White".

miércoles, 25 de agosto de 2010

Momentos históricos de los Wallabies



Me encuentro en casa de Rexman con dos videos maravillosos que recopilan las mejores jugadas enhebradas por los tres cuartos de la selección australiana entre 1979 y 1998.Una oportunidad para revisitar las míticas andanzas de, entre otros equipos, aquella máquina formada por prodigios como Campese, Horan o Lynagh.

domingo, 22 de agosto de 2010

Tri Nations 2010. Sexto asalto: funeral Bokke en el Soccer City



Que el mejor partido que se puede jugar a nivel de selecciones nacionales se acabe disputando en un estadio que se llama nada menos que Soccer City tenía que provocar los fenómenos extraños que esta pasada tarde se han podido ver en Johannesburgo (incluyendo un espectacular percance del árbitro Nigel Owens, que sobrevivió a un bestial atropello de Burger tras ser arrojado alevosamente a la picadora por Juan Smith). Ni apelando al orgullo de tratar de escapar al rosco (3-0) frente a los All Blacks o aprovechando la circunstancia del centenar de caps del Gran Capitán Smit, han podido enderezar los Springboks la trayectoria desastrosa de este 2010 terrible. Nueva derrota, sólo un miserable puntito, y la evidencia de que se deben tomar decisiones al final del torneo, que para los sudafricanos será en dos semanas. Para Nueva Zelanda, lo que nos tiene acostumbrados: nuevo título del Tri Nations, torneo que parece haberse inventado para ellos, aun jugando su peor partido de la temporada.

Lo curioso es que el partido no comenzó mal para los locales, que se comieron de inicio a los neocelandeses con una presión tremenda. La fiereza placadora de los verdes (en la que incluso se implicó la 'pulga' Aplon, que fue capaz de reducir a Muliaina, 20 kg más pesado) y la intensidad de sus acciones (con un revolucionado De Jongh a la cabeza) disparó las ilusiones de una afición últimamente maltratada. Bajo la buena dirección de Hougaard (no es Du Preez, pero mejora ostensiblemente a Januarie), que fue todo descaro, un scrum poderoso y unos flankers omnipresentes, los locales se escaparon en el marcador con el ensayo de Burger. Pero como suele suceder con Nueva Zelanda, toda posibilidad de vencerles se puede convertir en un espejismo en sólo un segundo. Son tan buenos que incluso en sus peores versiones (y ayer jugaron un partido muy flojo, sobre todo en la primera parte) son capaces de derrotar a cualquiera. Dominados durante los primeros 40 minutos, sin embargo se sacaron de la manga una rapidísima combinación para que Donnelly habilitara el ensayo de Woodcock que dejaba las cosas 16-14 al descanso. Poca ventaja para los locales, visto lo visto sobre el terreno de juego.

Pero en la segunda parte se volvió a la cruda realidad, y es que los Springboks carecen de recursos hoy en día, con tantas bajas y padeciendo una dirección técnica lamentable, para ser un rival serio de los All Blacks. El 2011 puede ser muy diferente (una vez recuperados Du Preez, Brüssow, Frans Steyn, Bismarck Du Plessis, Mtawarira, Bakkies Botha, etc.), pero a día de hoy la situación es pésima y complicada. Bastaba echarle un vistazo a la actitud de los entrenadores en sus 'peceras' (Henry tranquilote, De Villiers y Gold histéricos) para darse cuenta de quien es el que tiene la soga al cuello. Con Carter y Muliaina espesos, el cambio de Weepu por Cowan permitió, una vez más, ver una mejor versión de los neocelandeses, aunque tampoco fue ninguna maravilla, pues sin la ayudita arbitral (el ensayo de McCaw es discutible, pero no lo es el pase adelantado clarísimo que da inicio a la jugada decisiva del encuentro) no se habrían llevado la victoria. Pero en justicia la segunda parte fue para los visitantes, que dominaron posesión y territorio ante unos Springboks que se desfondaron física y anímicamente en la parte final. La victoria local peligraba a medida que nos acercábamos al minuto 80, pero el desenlace fue cruel para ellos, pues el ensayo de McCaw (no transformado por un errático Carter que, sin embargo, acabó superando a Wilkinson como máximo anotador mundial, dejando la nueva marca en 1113 puntos) que empataba el partido provocó una estampida atacante de los verdes que buscaba la redención, un ensayo o un drop goal que deshiciera las tablas, pero sin embargo lo que sobrevino fue un vertiginoso contraataque de los All Blacks dirigido por Nonu y finalizado por el prometedor Dagg que dejaba el 22-29 en el marcador para desgracia de los 94.000 espectadores congregados en el estadio. Las lágrimas de la familia de John Smit, unida a la decepción del capitán (elegantemente consolado por varios All Blacks), fueron la estampa más definitoria del estado en que se encuentra la selección sudafricana a día de hoy: derrumbada y al borde mismo del colapso. Ver a los vigentes campeones del Mundo (y hasta ayer también del Tri Nations) hundidos en la tabla con un solo punto provoca sensaciones poco edificantes.

sábado, 21 de agosto de 2010

La espera de Matt Stevens



La sanción de dos años a Matt Stevens (por consumo de cocaína) se encuentra a poco más de cuatro meses de finalizar. Fichado este año por los Saracens, a pesar de no jugar desde enero del 2009, sus entrenamientos ya han llevado a su entrenador Brendan Venter a reclamar un lugar para este hombre en el VI Naciones del 2011. Habrá que ver a qué nivel vuelve este prop de origen sudafricano que ya ha defendido en 32 ocasiones la zamarra de Inglaterra, pero posiblemente se convierta en un elemento indispensable de la interesantísima primera línea inglesa que está forjando Martin Johnson de cara al mundial del año que viene (Sheridan, Cole, el propio Stevens, Vickery, Doran Jones, Payne, no son una nada mala colección de pilares).

Dejo una entrevista realizada a Stevens hace un año, cuando ocupaba su tiempo libre llevando el Jika-Jika, un Coffee House de su propiedad (con su socio y ya ex-compañero en Bath Lee Mears).

jueves, 19 de agosto de 2010

Metamorfosis: de Lansdowne Road a Aviva Stadium



No soy contrario en absoluto a los avances científicos y a los logros de la técnica, pero en la construcción de cada nuevo estadio de rugby siento que se pierden más cosas de las que se ganan. Soy partidario si acaso de reformar los estadios míticos (caso de Twickenham) antes que derribarlos y reemplazarlos, de manera que el aura mítica no se vea arrasada por el hierro y el cemento nuevo. El paso del Arms Park al Millenium Stadium ya no fue de mi gusto, y mucho menos sucede con el cambio del viejo y entrañable Lansdowne Road (que estuvo operativo entre 1872 hasta 2007, año de su demolición) al nuevo y muy moderno Aviva Stadium, inaugurado el pasado 14 de mayo. Que un estadio de rugby parezca una nave espacial no es algo que me reconforte especialmente, por mucho que se gane aforo y comodidad.

martes, 17 de agosto de 2010

Sagas sudafricanas

La saga Burger

Me llama la atención la cantidad de parentescos familiares que se dan habitualmente en el rugby sudafricano. Hermanos, primos, padres e hijos. Todo el tejido del rugby en ese país parece estar hecho a base de sagas familiares que se van pasado la fiebre del rugby. La familia y el rugby parecen seguir una misma dirección, al menos en lo que tiene que ver con la población afrikaner, que es la mayoritaria en el mundo oval sudafricano.

Sobre dicha cuestión he caído estos días en una página que clasificó hace unos años muchos de estos parentescos: http://www.supersport.com/rugby/article.aspx?Id=192612

Según esta lista, tenemos hoy en día el caso de hermanos (los Du Plessis, los Wannenburg, los Cronje, los Mentz, los Grobbelaar o los Strauss, Andries y Richardt), primos (los citados con Adriaan Strauss de los Cheetahs), gemelos (los Ndungane), abuelos-nietos (Ernst Joubert y Piet Malan), pero lo que prima son las relaciones paterno-filiales, de los que podemos ver los siguientes caso, entre otros:

Ryan Kankowski es hijo de Tino Kankowski.

Andries Bekker de Hennie Bekker.

Luke Watson (ahora en Bath) de Cheeky Watson.

Philip Burger (Perpignan) de Thys Burger.

Schalk Burger de un idéntico Schalk Burger (foto arriba de la familia Burger).

Ruan Pienaar de Gysie Pienaar.

Fourie Du Preez es hijo de un ex-jugador del mismo nombre, y también sobrino del gran Frik Du Preez.

Pierre Spies también es hijo de un ex-jugador del mismo nombre.

Jano Vermaak de Deon Vermaak, etc.

domingo, 15 de agosto de 2010

Jonathan Kaplan



En Youtube he encontrado varios videos curiosos e interesantes sobre el árbitro sudafricano Jonathan Kaplan (para mí, junto a Rolland, el mejor del mundo en lo suyo). El primero es una entrevista que le hace el segundo entrenador de los Springboks, Gary Gold (ambos judíos), para el blog de éste y en la casa de uno de ellos. La primera parte está arriba y la segunda la dejo aquí mismo: http://www.youtube.com/watch?v=KMlzaHBelN0

El otro corresponde a una entrevista cómica realizada por dos jóvenes gamberros que tienen muy presente (basta ver las pintas que gastan) la condición hebrea de Kaplan. El video consta de dos partes:

Una: http://www.youtube.com/watch?v=j-fKCDMeL8c

y dos: http://www.youtube.com/watch?v=b0_uJmGKk1U

jueves, 12 de agosto de 2010

Fenómenos extraños en Sudáfrica

Frans Steyn

Desde hace un tiempo las cosas se están realizando de una manera muy extraña en Sudáfrica. Motivaciones políticas están torciendo la trayectoria de los actuales campeones del mundo. Por ejemplo, que cierto complejo de inferioridad del fútbol sobre el rugby esté provocando que se trate de ir 'futbolizando' el rugby, primero con la aparición en determinadas ocasiones de las repulsivas vuvuzelas, y después celebrando partidos importantes de rugby en recintos futbolísticos. Esta semana se va a dar otro caso de esto que digo, cuando los Springboks reciban a los All Blacks no en el Ellis Park, o en el Loftus Versfeld, sino en el Soccer City de Johannesburgo. Ya sucedió así con las semifinales y la misma final del pasado Super 14.

Más fenómenos extraños, esta vez relacionados con el seleccionador Peter de Villiers, que tras prescindir caprichosamente de los servicios de un jugador clave en el título del Tri Nations 2009 como es François Steyn, ahora lo llama para el choque frente a Nueva Zelanda, cuando resulta que Steyn viene fuera de forma, tras sus vacaciones veraniegas, y acabándose de incorporar a la disciplina de su equipo, el Racing Metro de París. Para colmo, parece que se produjo una lesión en la pretemporada. Hacer las cosas mal, con criterios dudosos y fuera de tiempo, es la seña de identidad de De Villiers.

miércoles, 11 de agosto de 2010

Currie Cup, jornada 5



Los mejores ensayos de la jornada número 5 de la Currie Cup: con varios de los jóvenes prodigios de la nueva Sudáfrica, como De Jongh, Van den Heever o Lambie, junto a Mvovo, Jantjes, Deon Fourie y varios jugadores de los Leopards.

martes, 10 de agosto de 2010

Tri Nations 2010. Quinto asalto: los All Blacks ganan la Bledisloe



Sin poder arrollar como en partidos anteriores, Nueva Zelanda volvió a ganar a Australia (una costumbre fija en los últimos 3 años, con 8 victorias seguidas ante los Wallabies, y 13 en total desde su derrota ante Sudáfrica en la penúltima jornada del Tri Nations 2009) para llevarse una nueva edición de la Bledisloe Cup (son ya 8 consecutivas para los neocelandeses) y sentenciar el Tri Nations 2010 (sólo le falta un punto para asegurar el torneo). Los Wallabies dieron mejor imagen que la semana anterior, pero durante la semana ese parecía ser el único objetivo del equipo: no ganar, sino impedir un nuevo vapuleo.

Tras un inicio que sí fue arrollador (los locales llevaron toda la iniciativa en la primera fase del partido, y el ensayo visitante sólo llegó gracias a un sorpresivo contraataque de un inspirado Beale), Australia fue haciéndose con la posesión del oval e incluso alcanzando posibilidades de cambiar el signo del partido, sobre todo en el minuto 30 cuando un robo en el line out de Robinson dejó a los Wallabies a unos metros de la línea de marca, pero la defensa de los locales fue un muro infranqueable. Los australianos, como digo, mejoraron bastante, e incluso dominaron gran parte del partido (en posesión y territorio), aunque a veces se obcequen en romper por el centro en lugar de buscar las alas. Todavía les sigue faltando algún tipo de ajuste para poder ser un equipo grande. Ya asentados en el equipo, y con galones, sus dos nuevas estrellas Genia y Pocock, ahora Deans debería subsanar el boquete que tiene el equipo en la posición de nº 8, donde sólo cuenta con un jugador fiable, el lesionado Palu, porque su sustituto, Brown, es un flanker que deja mucho que desear cuando juega en el centro de la tercera línea. También preocupa un poco los últimos partidos de O'Connor, tal vez algo despistado con tanto cambio de posición (como zaguero ha estado mucho mejor que como ala), y la llamativa insistencia de Deans en seguir situando a Giteau de 10, posición para la que este hombre no ha nacido.

Nueva Zelanda venció pero no entusiasmó, aunque hay que reconocer que las exigencias y espectativas relacionadas con este equipo siempre son tan elevadas que no siempre las podrán satisfacer. Aunque tal vez un detalle podría ser revelador: primer partido en el que su rival no se queda con 14, y la victoria se les hace mucho más costosa (debería tomar nota Peter de Villiers de cara a Johannesburgo). En este partido los de Henry se limitaron a cumplir, amarrando el partido con un arranque inicial espectacular que propició dos ensayos, y dejando la última hora a la especulación, cediendo el oval al rival para cerrarle todos los huecos, buscando mortíferos contraataques de Rokocoko y Muliaina. Señalar también que la dirección de Weepu fue magistral, que Carter mejoró mucho con el pie, y que los scrums siguen siendo un punto fuerte en esta temporada de los All Blacks.

Próximo asalto: tras una semana de descanso, será el sábado 21 de agosto en el Soccer City de Johannesburgo, entre Sudáfrica y Nueva Zelanda.

lunes, 9 de agosto de 2010

Interioridades: McCaw y sus compañeros por Escocia



Si la parte visible del rugby (los partidos) ya queda en España apartada fuera de foco, qué decir de las interioridades de los jugadores en sus vidas o desplazamientos. Por eso me gustan especialmente videos como el que dejo arriba, Inside the black jersey, centrado en la gira de los All Blacks por Europa en noviembre del 2008. Dedicado en su primer capítulo al gran capitán, Richie McCaw, el video muestra las andanzas de los neocelandeses por Edimburgo, antes de su partido ante Escocia: McCaw tocando la gaita (el Amazing grace), entrenamientos, sesiones de fotos, viajes en autocar, grotescas carreras de cerditos de peluche, etc.

2º capítulo de Inside the black jersey: los All Blacks en Irlanda, con Kieran Reed de protagonista.

3º: los All Blacks frente a Munster (Ali Williams).

4º: en tierras galesas (entrenadores).

5º: en Inglaterra (Dan Carter).

viernes, 6 de agosto de 2010

Tri Nations 2010. Cuarto asalto: Imparables All Blacks



Han bastado nada más que 4 jornadas del Tri Nations (es decir, ni medio torneo, pues consta de 9 partidos) para que el torneo ya esté decidido en favor de Nueva Zelanda. Se podrá maquillar más o menos el dominio de los renacidos All Blacks, podrán perder la Bledisloe Cup (aunque lo dudo mucho), pero el título lo tienen, como se dice en catalán, en "el sac i ben lligat". Y es que la paliza que infligieron a Australia la semana pasada fue de las que dejan huella, tanto para los vencedores como para los vencidos. La supuesta candidatura de los Wallabies al título, la idea ventilada por algunos de que la Australia de Deans ya estaba madura para grandes gestas (para mí, su proyecto iba perfectamente encarrilado hasta el inicio del pasado Tri Nations. A partir de ese momento, sumado a los problemas con Tuqiri y a la huida de George Smith, se ha ido para abajo), se desmoronó en un par de minutos, los que necesitaron Carter y un imperial Muliaina (insisto: ha vuelto el mejor fullback del mundo) para darle la vuelta al espejismo que significó el ensayo prematuro y accidental de Mitchell. Fueron sólo 5 minutos de ilusión para los locales, a los que siguieron nada menos que 75 de padecimientos de todo tipo para acabar en un severo correctivo que pone en su sitio al proyecto de Deans (28-49). Siete ensayos, siete, fueron cayendo, uno tras otro, ante la mirada trastornada de la afición congregada en Melbourne. El balance para los 'de negro' es inmaculado a día de hoy: 3 victorias en 3 partidos, con 3 bonus ofensivos (y no permitiendo un solo bonus defensivo a sus rivales). En el campo las mejores versiones de Muliaina, McCaw, Rokocoko o Carter (más afinado de cara a palos que en partidos precedentes). Con la delantera funcionando a tope, y con la pareja de centros Smith-Nonu engrasada como en el 2008 (no me extraña que el gran Luke McAlister no tenga sitio en este equipo), Nueva Zelanda se convierte en un torrente difícil de detener, en un equipo prácticamente invencible.

Fue tan clara la superioridad neocelandesa, tan poderosa su defensa y, sobre todo, tan arrasador su electrizante ataque, que los locales ni siquiera pueden apelar a la importancia de ciertas decisiones arbitrales en contra (como la rigurosa expulsión de Mitchell nada más iniciado el segundo tiempo); el desnivel general fue demasiado grande, y además la diferencia en el marcador ya era clara para los de Graham Henry en el momento en que Australia se quedó en inferioridad numérica. Precisamente fue en inferioridad cuando Australia desplegó su mejor cara, y un atrevimiento a tener en cuenta. Pero ya habían sido sepultados por errores individuales decisivos (de Barnes, de Mitchell, de Giteau, etc.) y por la asombrosa capacidad de los neocelandeses para ir sumando puntos cuando y como se proponían. En este sentido, la exhibición de poderío de los All Blacks fue más allá de la demostrada por los Springboks el año pasado, y es que ni en sus mejores partidos pudieron los sudafricanos sembrar un abismo cualitativo tan grande con sus rivales como el que está cavando este año Nueva Zelanda. Tras un año 2009 de penurias (derrota ante Francia en los tests de junio y desastre en el Tri Nations), los All Blacks vuelven a ser el mejor equipo del mundo, y lo hacen desplegando una capacidad rugbística única que marca con el resto diferencias difícilmente salvables. El Tri Nations lo tienen en la mano, es cuestión de pocas jornadas (podrían conseguirlo matemáticamente ganando mañana en casa a Australia, consiguiendo además el bonus ofensivo e impidiendo que los australianos obtengan el defensivo), y ya sólo falta ver si se llevarán de nuevo la Bledisloe Cup (apuesto cualquier cosa a que sí) y podrán acabar el torneo imbatidos (eso puede que no, aunque tienen muchas opciones).

jueves, 5 de agosto de 2010

Les Cris du Coeur


Les Cris du Coeur
Cargado por kinorugby. - Programas de ayer por la noche y clásicos de TV, online.

Veo en el blog del gran Phil Blakeway un video interesante que quiero rebotar aquí: el trailer de un mediometraje protagonizado por un ex-jugador de rugby, el francés Vincent Moscato (un tipo curioso: además de pertenecer a la secta oval, ha sido boxeador, actor o periodista). En el video, un viejo talonador preparándose para el combate, en este caso contra el implacable elemento marino.

domingo, 1 de agosto de 2010

Historia del rugby (9)



Más partidos históricos en los que participaron decisivamente los fantásticos galeses de los 70, en este caso la célebre victoria (con 'el mejor ensayo de la historia' incluido, obra de Gareth Edwards, cómo no) de los Barbarians ante Nueva Zelanda (23-11) en Cardiff (1973). El partido ha sido considerado como uno de los mejores de la historia de este deporte, y viendo los minutos del reumen incluido (casi la mitad de esta novena entrega) pocas dudas quedan sobre ello. La otra mitad está dedicada a la violenta gira de los Lions por Sudáfrica el año 1974, en la que se puso de relieve la cada vez mayor repulsa que generaba en el mundo el régimen del Apartheid.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...