miércoles, 29 de septiembre de 2010
Saracens rompe la invencibilidad de Northampton
Pocos equipos en la actual Aviva Premiership pueden presumir de tenerle tomada la medida a los Saints de Northampton, pero si hay alguno ese es precisamente el caso de los Saracens de Brendan Venter. Ya les vencieron el año pasado en temporada regular, en Wembley (no recuerdo también si en Northampton), además de eliminarlos en semifinales de la Premiership a domicilio, en el Franklin Gardens. Este pasado domingo se repitió la historia, con victoria de mérito para los Saracens en Vicarage Road 24 a 17, que significa detener una trayectoria que estaba resultando inmaculada para los de Jim Mallinder, que venían de vencer a los campeones Tigers y de laminar a otro de los favoritos, Bath. La victoria local se sustentó en la efectividad de Derick Hougaard con el pie, gracias al cual consiguió los 24 puntos de su equipo mediante 7 penaltis y un drop sensacional (escorado, desde el medio campo), y a la impresionante labor de su tupido entramado defensivo, que apenas dejó espacios para los tres cuartos de los Saints, y tampoco dejó que su poderosísima primera línea (Tonga'uiha, Hartley y Mujati) diera muchas señales de peligro. La lluvia caída sobre el estadio también influyó bastante en la pesadez y lentitud del juego.
El juego resultante fue el que más convenía al estilo habitual de los locales, es decir, lento, pesado, con especial atención al set piece, faceta en la que son unos expertos. La primera parte fue muy trabada, nada espectacular, y en ella naufragaron los mejores jugadores de los Saints, como el gran Ben Foden, que apenas tocó el oval en los primeros 40 minutos. La segunda parte fue más animada, y el juego a la mano tuvo mucha más presencia. De hecho, en esa fase llegó el único ensayo del encuentro, obra del visitante Diggin, aunque ya llegó demasiado tarde (sólo sirvió para conseguir el bonus defensivo). A destacar en los locales, además del apertura ex-jugador de los Blue Bulls y de Leicester, a otros dos sudafricanos de nacimiento: la fuerza de Mouritz Botha en el scrum y a la hora de placar al rival, y las grandes capacidades, en ataque y defensa, de un centro cada día más consolidado (para mí, con opciones para entrar en la lista mundialista de Johnno), Brad Barritt.
PS: antológica, en su habitual línea desastrosa, la narración de Teledeporte. Además de comenzar la emisión 25 minutos más tarde de lo indicado en la programación, ahora resulta que Borthwick sigue siendo el capitán de Inglaterra, cuando en el Planeta Tierra esa condición le fue trasladada a Lewis Moody antes del verano. También resulta que Dave Pearson no se pronuncia 'Deiv Pirson' sino 'Div Person'. Y, en fin, no sigo porque tanta tontería aburre.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario