domingo, 27 de febrero de 2011
VI Naciones 2011: Inglaterra coge la delantera
Se acabó la intriga: el máximo favorito para llevarse la actual edición del VI Naciones es Inglaterra. Por si había dudas, se disiparon ayer tarde sobre la hierba del magnífico Twickenham. Francia llegaba como la campeona, invicta en los últimos 8 partidos del torneo (su última derrota había sido también en Londres, hace dos años), con un scrum fabuloso y unos recursos inmensos. Ahora bien, también había demostrado unas flaquezas considerables (junio y noviembre), además de un espíritu refractario a su histórico y celebrado 'rugby champagne'. Pero la Inglaterra de Johnno está en dinámica ascendente y, como dije ayer, si no surgían circunstancias extrañas lo lógico era que se llevara la victoria. 17-9, un sólo ensayo, pero un partido muy vivo, apasionante, de brega y lucha constante.
Nunca me ha entusiasmado Martin Johnson como entrenador, pero es justo reconocer que va aprendiendo de sus errores. Tras dos años llenos de fracasos y con un consecuente panorama de depresión, parece haber conseguido que su equipo crezca a cada partido, tras apuntalar una línea de juego y una consistencia bastante continua. Todavía no están todos los mejores (me falta Jordan Crane, sobre todo, y tal vez también Flutey o Banahan, además de los lesionados Moody, Lawes y Croft), y ha quemado por el camino a jugadores muy aprovechables (Borthwick, Cipriani, Kennedy), pero ha ido rectificando determinados olvidos. Por contra, a Lièvremont le está pesando lo contrario: viene de cosechar éxitos y parece que eso le ha hecho renegar de determinados principios, al tiempo que le ha inoculado un miedo palpable a la derrota. Tal vez por eso su equipo no acabe aprovechando los fabulosos recursos con los que cuenta, limitado por ese espíritu de ir a la contra, tratando de aprovechar los errores del rival. Dosificando en demasía sus posibilidades, y el que venía a cambiar el 'estilo Laporte' está siguiendo su misma línea. Ante Inglaterra fue lo de siempre: cedieron la iniciativa y únicamente trataron de buscar la línea de marca en contadas ocasiones. Los locales aguantaron esas acometidas (tremendos Palmer, Cole y Haskell), no cometieron tampoco demasiadas infracciones, y dieron el golpe cuando tocaba, tras el regreso de vestuarios de la media parte. 'El expreso' Foden repitió ensayo ante Francia, superando fantásticamente a tres rivales, y podría haber subido otro de Ashton justo después si no fuera por un pase adelantado mientras se tramaba la jugada. Fueron momentos en los que Inglaterra dominaba claramente y los franceses aguantaban como podían, perdido su poderío en el scrum y sin iniciativa para cambiar de registro. Como otras veces, no había 'plan B', y las pocas jugadas de ataque razonablemente inspiradas no tenían continuidad. Yachvili no fue el talismán esperado, y Chabal naufragó totalmente, sin capacidad para avanzar con el oval (era sistemáticamente placado de tal manera que incluso perdía metros) y cometiendo errores constantes. En la última media hora se bajó ostensiblemente la velocidad; las fuerzas apenas acompañaban y eso se traducía en errores repetitivos en el control del oval y escasa imaginación ofensiva. El castigo había sido inmenso.
Una de las claves del partido había sido el scrum, donde el poderío francés ha sido enorme últimamente, pero el consistente pack inglés (con su sensacional primera línea, con Corbisiero o con Sheridan) aguantó las embestidas y ahí se ganó parte del encuentro. Incluso arrollaron a los franceses en el primer contacto de delanteras, en el minuto 3 (como puede verse en el video); fue un aviso de lo que sería después el encuentro. Es cierto que Foden y Ashton fueron atados en corto por la defensa francesa, pero Youngs tuvo cierto margen para dirigir el juego de ataque, sobre todo al inicio descollante de la segunda parte. Conectó bien con Flood y perforó varias veces a la defensa rival con sus rápidos ataques. Si no fuera porque en el hemisferio sur existe un señor que se llama Fourie Du Preez, podríamos decir con total tranquilidad que Youngs es el actual mejor 9 del planeta.
Al fin de fiesta se sumó el mítico Wilkinson, con unos buenos minutos en el campo (incluido un pase magistral a Ashton para una jugada peligrosísima en el minuto 70) y un penalty transformado que lo convierte, por el momento, en el máximo anotador de la historia en esto del rugby internacional, superando a Dan Carter. La marca queda, de momento, en 1190.
sábado, 26 de febrero de 2011
Le Crunch 2011
Hoy se juega 'El Partido' de la actual edición del VI Naciones (previa de Planet Rugby). Inglaterra y Francia llegan a su cita del templo de Twickenham como únicos invictos y principales aspirantes al título. El partido será decisivo, pero seguramente no definitivo. Si gana Francia tal vez sí, porque después ya sólo le quedarán dos partidos que deberían ser asequibles (salida a Roma y cierre ante Gales en París), mientras que a Inglaterra todavía le queda el hueso del final en Dublín (antes trámite en casa ante Escocia), ante una Irlanda que va recuperando bajas. Si echamos un vistazo a las últimas estadísticas, lo normal sería que ganara Inglaterra, vencedor en las dos últimas ediciones como local (2009 y 2007), además de una importante victoria el 2008 en París (donde mereció ganar el año pasado, aunque el catenaccio francés sacó tajada de su poderoso scrum). Francia únicamente venció en Londres el 2005, por un ajustado 17-18. También sería favorita Inglaterra si tenemos en cuenta, primero, que juega en casa, y segundo, que ha mejorado muchísimo en juego y resultados estos últimos doce meses.
En cuanto a las alineaciones, por parte de Francia, destacar la baja de Medard, que podría ser importante, teniendo en cuenta el gran momento de juego del zaguero/ala de Toulouse. Le sustituye su compañero de equipo Poitrenaud. Hay otras dos entradas que no entiendo: Chabal y Yachvili, por mucho que acostumbren a jugar motivados ante los de la Rosa. A Yachvili se le conoce como 'El hombre que derrota a los ingleses', pero le veo poca explicación a la suplencia de un Parra afianzado en la manija y que estaba a muy buen nivel. De nuevo parece que Lievrèmont determina estilo de juego y alineación según quién sea el rival. Por parte de Inglaterra, sólo una novedad con respecto al partido ante Italia, el regreso de Sheridan al flanco izquierdo del scrum. Wilko sigue en el banquillo, y aunque ya no tengo dudas de que Flood ha merecido (por ahora) la titularidad, me gustaría ver al mítico Jonny en el 15 titular (por ejemplo, en la plaza de Hape). No me gusta hacer pronósticos (carezco del don de la profecía y tirar a boleo me parece una pérdida de tiempo), pero me parece que si funciona el 'trío maravilla' (Youngs, Ashton y Foden) los de Johnno se llevarán el partido con cierta holgura. Eso sí, siempre y cuando su scrum no sea desmantelado totalmente por la máquina francesa.
Para abrir boca, dejo arriba el inicio del partido de la entrega de hace dos años, cuando Inglaterra vapuleó sorprendentemente a unos franceses que presentaron en Londres su condición de teóricos favoritos con locuacidad y bravuconería (sobre todo recuerdo unas declaraciones de Harinordoquy). La primera parte inglesa fue un dominio arrollador, absoluto, incontestable, ejecutado por los estiletes Flutey y Armitage (hoy ausentes, el segundo debido a una sanción) en forma de cuatro ensayos (29-0 al descanso). Los ingleses desarbolaron con una facilidad inmensa a la defensa francesa en uno de esos días en los que a Lievrèmont no le funciona su estilo reservón (es decir, cuando el rival no comete apenas errores y despliega un preciso y dinámico juego a la mano).
PD: dejo también la magnífica presentación de este antagonismo histórico que ofrece Phil Blakeway en su blog.
viernes, 25 de febrero de 2011
Primera jornada del Super 15
A la espera de decir alguna cosa sobre la reedición, mañana, de 'Le Crunch', dejo unas imágenes de los mejores ensayos de la primera jornada del nuevo Super 15. Enorme jugada de Jimmy Cowan en el ensayo de unos Highlanders que han comenzado fuerte (victorias ante Hurricanes y hoy mismo ante los Chiefs), sensacional ensayo de Van den Heever ante unos Lions más duros que los del año pasado (cómo se nota la mano de Mitchell y el talento de los jóvenes Jantjies y Taute, dos de los mejores descubrimientos de la pasada edición de la Currie Cup), derrota de unos Crusaders tocados por la desgracia (el terrible terremoto de estos días en Christchurch que ha obligado suspender supartido de la segunda jornada), un O'Connor cada día mejor y líder absoluto de unos Force que dieron más guerra de la esperada a los Reds de Genia y Cooper, paliza de los Waratahs a los estrenados Rebels, gran ensayo de Coleman de los Brumbies, etc.
martes, 22 de febrero de 2011
VI Naciones 2011: Gales vuelve a la victoria ante una desastrosa Escocia
Comienzo a pensar que lo de Escocia es genético, o algo así, porque a la habitual desconjunción de sus hombres en el cesped se une cada vez con mayor intensidad una carencia general a la hora de cantar el himno. ¿Se han fijado que cuando se canta el Flower of Scotland música y voz no suelen ajustarse al mismo compás? Incluso, como fue el caso de este partido, las voces de un sector del público avanzan el despliegue de los versos con mayor rapidez que el resto. Lo que queda es una desesperante cacofonía que une lo que sucede en la grada con el despropósito visto poco después en la terreno de juego. Y es que Escocia parece no tener remedio: cada vez que promete dar el salto, cuando parece que esta vez sí van a dar el 'do de pecho', se vienen abajo penosamente, dando una imagen deplorable.
El partido prometía, pero resultó ser un simulacro sin apenas nada que echarse a la boca. Únicamente unas cuantas jugadas de mérito de Gales, como las del primer ensayo, en el que consiguen engarzar unas tres o cuatro fases interesantes, coronadas por una penetración por el centro de Hook (que demostró en jugadas así que debe ser titular, pues aporta mayor grado de creatividad que Stephen Jones) que en preciso off load sirve el try a Shane Williams. El segundo, también conseguido por el ala de Ospreys (que lo deja a un sólo ensayo del registro de O'Driscoll en la lista de máximos anotadores del VI Naciones, en la que el irlandés es segundo), llega tras un inspirado pase a la espalda de la defensa escocesa de Jonathan Davies. Poco más se puede destacar, tal vez el gran trabajo del flanker Warburton, que sigue creciendo a cada partido. Gales no jugó un buen partido, pero al menos regresó a los llamados 'wining days' con esta victoria importante (6- 24) en Murrayfield.
Por parte escocesa, un auténtico solar. Desastrosos en el juego a la mano, sin ni una sola idea más que empotrarse estúpidamente contra la defensa rival o fallar patadas y recepciones (como Southwell, en los 20 penosos minutos que duró en el partido hasta 'autopartirse' la cara ofreciéndosela a la bota de Lee Byrne). Un equipo que no sabe aprovechar una doble superioridad numérica (fruto de las exclusiones de Bradley Davies y Byrne), más que con 3 míseros puntitos, no merece ganar un partido. Siendo generosos, sólo Sean Lamont aportó pequeños detalles, intentando sacar provecho en ataque a sus potentes condiciones y con una espectacular jugada defensiva que evitó el que parecía claro ensayo de Jamie Roberts (que tuvo algunos minutos inspirados en la primera parte). No entiendo el motivo por el que Andy Robinson no concede la titularidad a Lamont (este fin de semana jugó con los Scarlets, así que imagino que volverá a salir con Escocia desde el banquillo), un jugador muy superior al mediocre De Luca, aunque fallara en la jugada del segundo ensayo galés (ahí se notó que Lamont, a diferencia de su hermano pequeño, no está habituado a jugar como fullback).
Dato final curioso: muchos jugadores de los Llanelli Scarlets en el campo, ocho en total, cosa rara estos últimos años. El escocés Lamont, y los galeses S.Jones, J. Davies, Rees, Stoddart, Priestland, Knoyle y Turnbull, para poner en evidencia la buena temporada que están realizando los Scarlets.
lunes, 21 de febrero de 2011
El recital de Ruan Pienaar
Ruan Pienaar es un jugador de una elegancia difícil de ver. Tan buen medio scrum como apertura, su carrera internacional se ha visto algo comprometida debido a que en ambos puestos tiene por delante a dos superclase: el mejor 9 de la última década, Fourie Du Preez, y el apertura Morné Steyn, una de las botas más infalibles del mundo oval. Su fichaje por Ulster esta temporada ha tenido que ver con cierta falta de oportunidades en los Springboks (delirante es que, al inicio del pasado Tri Nations, Peter de Villiers prefiriera a Januarie antes que Pienaar para sustituir al lesionado Du Preez), aunque de todas formas podrá seguir participando con su selección (por la nueva ley que permite seleccionar a tres jugadores 'europeos'). Pienaar está haciendo una muy buena temporada con los de Belfast, y su incidencia indispensable en el juego de Ulster pudo apreciarse este pasado fin de semana, cuando gracias a su capacidad para dirigir a los suyos y perforar las líneas rivales, además de su conocida habilidad en el pateo (6 de 6), pudieron obtener una meritoria victoria (16-18), en el último segundo y gracias a un lejanísimo tiro, en el difícil feudo de Llanelli Scarlets (donde creo que no había ganado nunca).
viernes, 18 de febrero de 2011
El terrible caso de Stuart Mangan
Mientras busco tiempo para visionar el Escocia-Gales y alguno de los primeros partidos del Super 15 (cuyo formato no me gusta demasiado), iniciado con un bautismo de sangre para los debutantes Rebels de Melbourne, dejo aquí este documental que vi el año pasado sobre el terrible caso de Stuart Mangan (1983-2009), un joven irlandés jugador de rugby que quedó tetrapléjico a consecuencia de un golpe producido durante un partido. El cambio entre su vida anterior, vital y desbordada de pasiones, y la que lo relega a una silla de ruedas y múltiples cuidados más para conseguir su supervivencia (entre ellos el escalofriante tubo respiratorio insertado en su cuello) es de las cosas más terribles que he visto. Me he acordado de Mangan estos días tras visitar a un amigo en un hospital de Palma, donde otro amigo que trabaja allí de enfermero me presentó a un chico tetrapléjico que lleva toda su vida en el hospital (ahora cumplirá 19 años). Impresionan mucho este tipo de casos, y es difícil decir cuál de ellos es peor, pero creo que la experiencia de Mangan añadía un elemento si cabe más perturbador: él había tenido una vida normal hasta que sucedió el accidente, de modo que podía comparar su desgracia con un tiempo previo de felicidad y libertad. El chico del hospital palmesano no ha tenido esa opción torturadora, pues fue un mal uso del forceps en el mismo momento de su nacimiento lo que lo dejó totalmente incapacitado.
Dejo las otras partes del documental dedicado a Mangan: segunda, tercera, cuarta y quinta.
jueves, 17 de febrero de 2011
Brutos... y muy caballerosos
Descubro en los aposentos del maestro Phil Blakeway este artículo brillante de Julián Méndez en las páginas de El Correo, titulado Brutos... y muy caballerosos. Dejo constancia de que en la prensa española no sólo se habla, en las contadas ocasiones en que se cita al rugby, de chorradas y superficialidades.
lunes, 14 de febrero de 2011
VI Naciones 2011: una brava Irlanda no puede con el catenaccio francés
No hay duda, la Francia de Lievrèmont se entrega cada vez más al miserable catenaccio. Tomaron nota del 'modelo Springbok' del 2009 y lo están aplicando con grandes resultados en el hemisferio norte (con rivales del sur ya tienen más problemas). Es un estilo rácano, que huye del riesgo y trata de sacar provecho de un gran set piece, lo mejor de esta selección. Gusta de ceder la iniciativa al rival, dejar que sea éste el que arriesgue y proponga, para aprovechar con la máxima efectividad sus errores. Ayer pudimos ver un nuevo capítulo de este estilo, con un rival que practicó el rugby de toda la vida, un juego de ataque, a la mano, sin apenas patadas, siempre con la línea de marca rival entre ojo y ojo. Un juego con iniciativa, más ambicioso, y eso, por supuesto, implica también un peligro, como es el de caer en un mayor número de errores e imprecisiones. Irlanda llevó siempre la iniciativa, pisó la línea de 22 rival mucho más que los franceses (44 balones en esa zona por sólo 7 de los franceses), buscó un juego directo con todas las fases que fueran necesarias (más de 20 en el ensayo de Heaslip), y anotó 3 ensayos, por únicamente uno de su adversario. Pero, claro, cometieron errores que les impidieron llevarse el partido. Los más claros: demasiados penalties en su propio campo (que se fue cobrando la zurda infalible de Parra), y muchos errores en el juego a la mano, por ejemplo el de Sexton a los 17 minutos, que ejemplifica lo que fue el partido, con una Irlanda que salía frenética al ataque, con 10-3 en el marcador, pero el mal pase del apertura de Leinster provocó un penalty de McFadden que se cobró, cómo no, Parra. De ese tipo de situaciones (unido al error de placaje de D'Arcy en el ensayo francés) vivió una Francia rácana para ganar un encuentro que se les podría haber ido de las manos si Cronin no comete knock on en la penúltima jugada del partido (min 79).
A pesar de la victoria, un detalle preocupante para los franceses es su defensa. Si su set piece brilla a gran altura (scrum dominante, aunque no tan letal como ante Escocia, y un line out muy eficiente), el nivel defensivo, de pura contención, va en retroceso, pues encaja demasiados ensayos: 3 ante la débil Escocia y otros 3 en Dublín, para un total de puntos en contra indigno de un equipo de su nivel. En el juego cerrado todavía mantienen una cierta consistencia, pero se les puede hacer mucho daño con el juego abierto y fases muy veloces (Irlanda sólo lo consiguió en parte). Otro aspecto preocupante, porque en cualquier momento se le puede volver en contra, es ese estilo de juego parecido al catenaccio que se limita a explotar los errores rivales, pues si Escocia e Irlanda no han sido capaces de equilibrar en puntos lo que han demostrado en ambición y voluntad de ataque, lo contrario ha sucedido con equipos del hemisferio sur. Gigantes como Nueva Zelanda y Australia apenas cometen errores, y eso es la tumba para Francia, pues su estilo 'descuidero' se queda bloqueado, sin posibilidades, ante un rival que mantiene un nivel bajo de fallos.
domingo, 13 de febrero de 2011
VI Naciones 2011: el imperio inglés tritura a los plebeyos
Hay partidos que los gana la historia, el bagaje de bregar durante tres siglos por el barro en busca el codiciado oval, el saber todos los trucos que el rival recién llegado a esto desconoce totalmente. Pero hay otros partidos en los que no hace falta recurrir al peso inercial de la historia pues es el talento el que se conjura para demostrar una tiranía absoluta. Inglaterra fue un equipo tirano ayer, un equipo que no necesitó de su pasado sino que mostró una vitalidad pasmosa para destrozar implacablemente a unos italianos (59-13) que, espejismo o no, parecían estar en cierta forma tras el susto que le endosaron a los irlandeses la semana anterior. Los ingleses jugaron al rugby con una facilidad portentosa, cada vez más finos en las combinaciones de ataque, incluso con una cierta ingravidez que los empujó a anotar nada menos que 8 ensayos (recordemos que Italia sólo encajó uno ante Irlanda), con el fenomenal Ashton estelar consiguiendo 4 (creo que son 9 en 9 caps con Inglaterra). Eso sí, cómo se nota que el ala de Northampton viene del Rugby League, porque es impresentable que insista con sus infantiles celebraciones de cada ensayo.
Lo curioso, y eso suele pasar a veces, Italia salió con ambición y ganas. Espoleados por su buen partido en Roma, querían plantar cara desde el principio. Llevaron la iniciativa incluso con el primer ensayo de Ashton, pero fue llegar el segundo a mediados de esta primera parte (todavía con 10-6 en el marcador) para que se vinieran abajo sin remedio. Inglaterra, que se había limitado a resguardar su línea de 22 sin problemas (pero había cometido unas 3 penalizaciones muy seguidas, que permitieron excesivos tiros a palos, aunque Bergamasco falló el tercero), evidenció una capacidad ofensiva arrolladora, una facilidad para la combinación entre sus hombres insólita en la época Johnno, con Youngs de cada vez más perfecto maestro de ceremonias, un Flood muy inspirado (sublimes sus pases interiores) y un Tindall indispensable. La paliza ya era evidente en la media parte (31-6), tras 4 ensayos locales, pero siguió incrementándose en la segunda, con otros 4 tries más, ya con cambio de medios (Care y Wilko) y con Banahan dejando detalles de que podría llegar a ser, si trabaja más, el Lomu europeo.
El 'trío maravilla' (Youngs, Ashton y Foden) volvió a demostrar que ha sido el elemento decisivo para el salto de calidad del equipo de Johnno. Ya nadie puede dudar que se trata de 3 de los mejores zagueros que hay en el mundo oval. Recordemos que el seleccionador tardó excesivamente en premiar su descomunal labor en sus equipos de la Aviva-Guinness, únicamente al final mismo del anterior VI Naciones (penúltimo y último partido, básicamente), y sobre todo en la gira de junio del 2010 (con victoria importante ante Australia). Porque cuando han entrado estos tres fenómenos en el 15, el equipo ha experimentado una transformación progresiva en beneficio del dinamismo, del descaro y de un juego arrollador. El equipo lento y pesado que era la Inglaterra de Johnno hasta junio de 2010, una tropa sin ideas y que sólo sobrevivía gracias a la inercia de la historia, se ha convertido gracias a este trío en una máquina más asentada para grandes logros. Ahora se están confirmando las buenas señales de junio y noviembre, y tal vez se llegue en las mejores condiciones al Mundial (aunque a mí me faltan todavía algunos ajustes, además de la vuelta de los lesionados: Crane por Easter y Wilko por Hape. Palmer y Cueto, en cambio, se están ganando la titularidad). Swiiiing low, sweeeet chaaaaariot!
viernes, 11 de febrero de 2011
VI Naciones 2011: Irlanda juega con la debacle
Poco hay que decir, rugbísticamente hablando, sobre el partido que disputaron Italia e Irlanda (11-13). Un desastre del que sólo escaparon los dos ensayos, de BOD y el italiano McLean. Italia tiene cierta excusa, habida cuenta de su condición inferior, pero lo de Irlanda resulta muy preocupante. De acuerdo que las bajas acucian y el equipo no fue el mejor posible, pero que tenga que ser la pierna mágina de O'Gara la que, con un drop en el minuto 78, impida lo que podría haber sido la primera victoria transalpina ante los hibernios, es como para preocuparse. Kidney no consiguió que funcionara apenas nada, y el equipo únicamente mantuvo un cierto dominio al inicio de la segunda fase, pero la defensa italiana se mostró consistente. No hay patrón de juego, ni se consiguen abrir espacios. Lo peor, sin embargo, fue el scrum, donde los irlandeses, con una primera línea totalmente nueva (ni rastro, por distintos motivos, de los campeones del 2009 Horan, Flannery y Hayes), fueron ampliamente superados por el paquete italiano, la mejor baza de Mallet. Como no mejore la cosa (parece que Heaslip vuelve, y esa es una buena noticia), el todopoderoso scrum francés va a liderar un asalto absoluto al Aviva Stadium el próximo domingo.
miércoles, 9 de febrero de 2011
VI Naciones 2011: el scrum francés, arma de destrucción masiva
Gran partido en el Stade de France (34-21) en el que ambos equipos pudieron extraer lecciones positivas sobre su actual estado al inicio del VI Naciones. Francia olvida su debacle ante Australia y los escoceses demuestran que no son una mera comparsa. Escocia, contra lo que señalaba el juego de sus últimos años, fue valiente y trató de jugarle a los franceses con descaro (aunque nunca tuvieron opciones de llevarse el partido, siempre controlado por los locales). Pero eso a la Francia de Lievrèmont le encanta, pues tiene una facilidad asombrosa para dejar que el rival se vaya desgastando en sus estériles acometidas (Escocia contó con mayor posesión durante la primera parte), para salir al contragolpe con una efectividad absoluta, cobrándose prácticamente todos los errores del rival. Los ataques franceses son rápidos y vertiginosos, desarrollados a partir de fases muy dinámicas en las que sus tres cuartos se van desplegando con un criterio que se ve muy trabajado, a la vez que incluso sus pilares mueven el balón como si se tratara del medio scrum. Casi parecen las famosas unidades blitzkrieg en sus penetraciones rápidas e imparables en territorio enemigo. No les interesa mecer calmosamente el oval, sumar fases lentas y prolongadas, sino que buscan eléctricamente avanzar con el máximo de velocidad posible, y si encima tienen a un Trinh-Duc haciendo juegos malabares (pase bajo las piernas en el tercer ensayo), ya queda poco que objetar a su dominio. Es un sistema que cuando les sale aporta resultados muy estimables, aunque también se ha demostrado que ante equipos con ataques devastadores capaces de sortear su dispositivo defensivo, como Nueva Zelanda (noviembre 2009) y Australia (noviembre 2010), pueden ser ellos los que acaben saliendo trasquilados (también ante Inglaterra en Twickenham, hace dos años).
¡El scrum francés! Sin duda es ahora mismo el elemento rugbístico más desestabilizador que hay en todo el VI Naciones. Ningún talento concreto de las otras selecciones (ni el trío Youngs-Ashton-Foden en Inglaterra, o la tercera línea irlandesa, ni los imaginativos tres cuartos galeses) alcanza a día de hoy el poder devastador del paquete de los bleus, que arrolló implacablemente a la buena delantera escocesa, chamuscando seriamente a Euan Murray. Es despótico este scrum: insulta, humilla, ridiculiza a sus rivales, los arrolla. Lievrèmont cuenta en sus manos con una auténtica 'arma de destrucción masiva' que los puede llevar por sí mismo, con total tranquilidad, a revalidar título este 2011. Son 8 tipos, pero parecen una sola máquina: Domingo-Servat-Mas-Nallet-Pierre-Harinordoquy-Dusautoir-Bonnaire. Sin embargo, en la ventaja también tienen el defecto, y es que Francia depende excesivamente de que estos 8 hombres estén siempre disponibles, porque es cuando introducen los cambios necesarios por cansancio o lesión que comienza a perder algo de fiabilidad tanto el scrum (a Guirado y Ducalcon les cuesta mantener el nivel), como también la defensa (el ensayo de Kelly Brown es una muestra palpable) y finalmente el line out (donde perdieron su inmaculada imbatibilidad en el minuto 62, con el primer lanzamiento de Guirado).
En cuanto a Escocia, decir que va mejorando en actitud y capacidad ofensiva, pues no en balde consiguió nada menos que 3 ensayos, cifra que en ocasiones no obtiene ni en una completa edición del torneo. Como digo, su ataque fue más activo, pero le falta ajustarlo, pues en ocasiones desperdiciaban avances tras quebrar la línea por falta de apoyos o defectuosos off loads. En cambio, empeoraron anteriores actuaciones en el scrum y el line out, donde los franceses le cazaron más de un envío a Ross Ford. Por contra, me gustó la conexión entre sus medios, Lawson y Parks (que impidió la habitual incomunicación escocesa entre delantera y zagueros), y más todavía ese espléndido lock que es Richie Gray, del que, si tenemos en cuenta su precocidad (21 añitos) promete un gran futuro para los caledonios (aunque falló en el ensayo del tío Imanol), formando una segunda línea muy potable junto al capitán Kellock. Interesantes también Joe Ansbro y Nikki Walker, aunque con De Luca nunca he acabado de entender porqué está en el equipo nacional, pues Sean Lamont es una baza mucho más sólida (como demostró a su salida, con un ensayo precioso).
sábado, 5 de febrero de 2011
VI Naciones 2011: Inglaterra da el primer paso
No fue un gran partido ni una victoria de las que dejan temblando al rival, ni mucho menos, pero Inglaterra ha cumplido con lo que no todos dábamos por seguro: vencer a Gales en Cardiff (donde no se ganaba desde el mítico 2003) y dar el primer golpe en la carrera hacia uno de los títulos con más historia del mundo del deporte. Al final, 19-26, mandando durante gran parte del encuentro aunque atravesando innecesarios problemas hacia el final, cuando los galeses consiguieron ponerse a sólo 4 puntos (19-23 a poco más de 4 minutos para el cierre). La zurda de Wilko selló un partido que puede ser decisivo para las aspiraciones inglesas, que ahora deberán afrontar la cuesta abajo que significa jugar tres partidos seguidos en Twickenham, para finalizar en Dublín la andadura de este año.
Pero para mí Johnson sigue equivocándose confiando en varios jugadores que no deberían ser titulares (Hape, Easter y Cueto), pero la movilidad que ha adquirido este equipo con el rol importante que juegan en él el trío Youngs-Ashton-Foden suple muchas otras carencias. Youngs no estuvo excelso, pero se bastó para mover a su delantera en avances pesados pero seguros hacia la línea de marca, y distribuyendo a sus tres cuartos cuando era necesario atacar en carrera y buscar los espacios. Flood, que realizó un muy buen partido, aprovechó uno de esas brechas entre los dos pilares rivales (el errático Powell tampoco anduvo rápido en el apoyo) para colarse y dejarle un off load perfecto al siempre eficaz Ashton para que abriera el marcador. La verdad es que los de la rosa se limitaron a aprovecharse de los errores rivales, sin plantear un partido arrollador al estilo del que jugaron a Australia en Twickenham, pero con eso les bastó para pescar este primer ensayo, y aprovechar perfectamente su superioridad numérica en la segunda parte (10-0 de parcial). Insistieron excesivamente en atacar por el centro, imagino que espoleados por el primer ensayo, sin apenas buscar las alas (especialmente la de Ashton, claramente desaprovechado en favor de la zona de un Cueto muy espeso) o las portentosas entradas desde atrás del tren Foden, que ayer volvió a demostrar que está fuerte como una roca noqueando a Stephen Jones, que trataba de placarlo a los 30 segundos de partido (fue una escena parecida a la de Kellock el año pasado en Murrayfield). Pero en conjunto, a los ingleses se les vio físicamente muy fuertes, preparados para la batalla como no lo han estado desde hace tiempo. Duros, compactos, con una primera línea de granito, se les ve concentrados en la tarea. Eso les permitió superar la falta de encaje de algunas de sus piezas.
Por contra, lo de Gales ya adquiere connotaciones tétricas (no ganan desde hace casi un año). Los del dragón jugaron sin iniciativa ni personalidad, demostrando que el gran S. Jones ya no está para llevar el 10 a la espalda (sigo echando en falta que Gatland se la juegue dándole ese número a Hook o Biggar, con una creatividad más adecuada para el estilo dinámico de sus tres cuartos), fallando tiros a palos decisivos (unos cuantos al inicio del partido) y, para colmo, no aprovechando en absoluto su respectiva superioridad cuando Deacon se fue al sin bin (el parcial fue 0-3 para los ingleses). Únicamente demostraron su calidad cuando despertaron sus dormidos centros, sobre todo Jonathan Davies ('conexión Scarlets' en el ensayo galés: Jones, Davies y un Stoddart que le dio bastantes problemas a Cueto), para acorralar durante unos minutos emocionantes a los de blanco, aunque finalmente sin recompensa. Este equipo lleva demasiado tiempo jugando a arreones, a base de raptos momentáneos de inspiración, y sin plan de juego ni un mínimo de concentración y regularidad, me temo que son candidatos incluso a la Cuchara de Madera. Sin duda.
Aunque soy 'wilkinsoniano', reconozco que en esta ocasión Flood mereció la titularidad (efectividad total con el pie, para 13 puntos finales), y si sigue a este nivel, Wilko lo va a tener complicado para jugar muchos minutos en este torneo. Sin embargo, Wilko está en un gran momento de forma, y no se puede desaprovechar un jugador así, así que me tomo la licencia de asegurar que yo, si fuera Johnno, le daba el puesto de primer centro, donde ya ha jugado, pues creo que lo haría bastante mejor que el sobrevalorado Hape.
jueves, 3 de febrero de 2011
Comienza el VI Naciones 2011
Mañana viernes comienza una nueva edición del mítico VI Naciones, y lo hace saltándose una tradición más: comenzar precisamente en viernes, con un Gales-Inglaterra en el Millenium Stadium de Cardiff. El trailer promocional realizado para la ocasión por la BBC no es tan estimulante como el de los dos últimos años (es algo más soso, y más escueto también), pero la seductora voz de Elvis Presley (The wonder of you) lo hace más estimulante. Pero recurro una vez más al gran Phil Blakeway, quien describe magníficamente en su blog los elementos primordiales de este evento magnífico que es el VI Naciones: "La Calcutta Cup, la Cuchara de Madera, Flower of Scotland, los coros del Dragón en Cardiff, los silencios contenidos, la mirada fiera y el rostro contraído, el respeto al referee, la rosa de Lancaster, el cardo vencedor de Haakon en la batalla de Largs, las plumas de avestruz ganadas por el Príncipe Negro en Crécy, el trébol trinitario de San Patricio y el gallo soberbio".
Este año me parece que no existe un claro favorito, ni siquiera la campeona vigente, Francia, que desde que ganó el pasado Grand Chelem se ha dormido totalmente, siendo batido claramente por Sudáfrica y Argentina en junio, y apalizado vergonzosamente por Australia en noviembre, en el mismo Stade de France. Prueba de esta igualdad es que muchos analistas profetizan que no habrá Grand Slam este año, y a mí me parece también que eso puede ser muy posible.
Inglaterra podría ser un equipo con opciones de llevarse el título. Pero a pesar de la mejora experimentada en noviembre, hay que tener en cuenta algunos datos, y son demoledores para las aspiraciones inglesas. Como recuerda Robert Kitson en The Guardian, la escuadra de Johnno sólo ha vencido en 4 de sus 16 últimos partidos como visitante en el VI Naciones... y 3 de esas victorias fueron ante la débil Italia. Y ganar fuera va a resultar decisivo si quiere llevarse el VI Naciones, pues tiene que visitar Dublín y Cardiff. En uno de los dos casos, al menos, debería vencer, y asegurar sus tres partidos en casa, claro. El 'trío maravilla' (incluido creo que algo tarde en el 15 titular por su seleccionador), formado por Youngs, Ashton y Foden, debería llevar la iniciativa en unos tres cuartos más dinámicos desde que cuenta con su presencia. También podría ser importante la reincorporación de Wilkinson, aunque el nefasto Johnno lo deja en el banquillo de cara al partido de mañana en beneficio del limitado Flood.
Su rival mañana, Gales, lo tiene complicado de cara al torneo, pues a la dinámica claramente descendente desde que se llevara el último Grand Slam en 2008 hay que sumar una suma importante de lesionados. Para colmo, el seleccionador Gatland deja fuera de la convocatoria a Dan Biggar, el que debería ser el 10 de Gales durante mucho tiempo. Lo mejor, tal vez, la recuperación del gran centro exterior Jamie Roberts, secundado mañana por uno de misa candidatos a jugador revelación del torneo, del centro interior de los Scarlets Jonathan Davies, un portento físico que es igualmente poderosos en ataque y en defensa.
En cuanto a lesiones, Irlanda es el equipo más perjudicado hasta el momento, con casi medio equipo titular en la enfermería. De todas formas, pocas veces como ahora han contado los del trébol con una cantera tan numerosa y que atesore tal nivel de calidad. Uno de los que serán titulares el sábado debido a las bajas será Sean O'Brien, flanker de Leinster, otro candidato a jugador clave en este torneo. Difícil lo tenmdrán para repetir el éxito del 2009, pero siempre serán un rival con opciones en todos los partidos que dispute. Por su parte, Escocia sigue una dinámica opuesta a la de los dos últimos equipos citados, pues desde que Andy Robinson sustituyera a Frank Hadden al mando de los caledonios, estos han experimentado una clara mejoría. Poseen uno de los mejores paquetes delanteros del hemisferio norte, y cuentan con un pateador de lujo, el recuperado del ostracismo Dan Parks, pero siguen padeciendo una desesperante inoperancia en su línea de tres cuartos, que tampoco es que sean tan malos (jugador a jugador), pero no encuentran una línea de juego en la que puedan demostrar sus cualidades (para más inri, padecen la retirada por lesión de su estilete Thom Evans). Escocia tiene el demérito de ser uno de los peores ataques que hay en el mundo del rugby (de nivel); apenas ensaya, y así, únicamente gracias a las botas de Parks o Paterson, es difícil sumar victorias con regularidad. De todas formas, viene de batir a Irlanda en la última jornada del pasado VI Naciones, a Argentina en junio (por dos veces) y también a la poderosa Sudáfrica (las 3 primeras a domicilio). De Italia diré poco, porque espero poco. Este año su partido contra Escocia (el único que suelen tener opciones de ganar) se disputa en Murrayfield, y eso implica muchas posibilidades para quedarse con la famosa cuchara de madera.
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