sábado, 10 de septiembre de 2011
RWC 2011: Una ridícula Inglaterra al borde del desastre
Ingl vs Arg. from rexman on Vimeo.
Siguen las dudas en Inglaterra. Ni aunque se vistan de negro, imitando-homenajeando a los All Blacks, demuestran la consistencia del ganador. Tras lo visto en su victoria agónica 13-9 ante Argentina, el equipo de Johnno no tiene apenas opciones de luchar por nada en este Mundial. Es cierto que en estos campeonatos su evolución tiende a una dinámica positiva tras un mal inicio (recordemos la paliza recibida ante Sudáfrica en el inicio del 2007), y que Youngs es un jugadorazo imprescindible para dirigir con criterio y agilidad a este equipo, pero la imagen que han dejado los ingleses ante unos correosos Pumas, fajadores únicos pero con evidentes limitaciones, ha sido lamentable. Han tonteado con el desastre desde el principio hasta el final, perdiendo hasta el minuto 67, y sufriendo incluso en los últimos instantes. Sigo pensando que jugadores como Ashton, Foden y Tuilagi, a pesar del mal partido que han jugado, son piezas necesarias para una Inglaterra con opciones, pero sin Youngs como director de orquesta los backs apenas entran en juego (el gris Wigglesworth no tiene entidad para ser titular en este equipo. Si Youngs no está bien físicamente, no entiendo por qué no se le da la opción a Simpson, mucho más creativo), y de nuevo vemos a un equipo sin alma, gris, agarrotado, incapaz de imponer iniciativa alguna, permanecienco temerosamente cerca de su scrum. Jugando de esta manera ante los tres cocos del Sur, la paliza histórica (en contra, claro) está asegurada.
La primera parte de Inglaterra ya fue deplorable, reflejo de lo peor de la etapa Johnno. Como prolongación de lo sucedido en Dublín (aunque sin la contrapartida positiva), incidieron en un rosario de penalizaciones estúpidas que, afortunadamente para ellos, no fueron aprovechadas por los erráticos Contempomi y Martín Rodríguez, que podrían haber abierto una ventaja tal vez insalvable. Argentina hizo su partido, un partidazo, el que le permiten los elementos de que dispone (inferiores a los del último Mundial, sobre todo tras la lesión del 'Mago' Hernández'), y se vació en los primeros 40 minutos, con una intensidad física tremenda, aplastante (que les costó varios lesionados), presionando a la delantera inglesa, cerrando las salidas del scrum, luchando cada balón, defendiendo cada metro, dominando los rucks y robando algún line out incluso. Bastaba ver cómo cantó cada equipo el himno para darse cuenta de quien estaba más concentrado. Muy mal la primera línea de placaje inglesa, por la que se escurrían Camacho y Agulla con excesiva facilidad, sumando metros a sus ataques. Ya he dicho, pero lo repito, que Wigglesworth no es un medio scrum con nivel para ser titular en el 15 de la rosa (no se entiende con sus terceras y apenas despliega a los backs), lo mismo puede decirse del mediocre Easter, y además la pareja de centros estuvo absolutamente desaparecida, al igual que los alas. Únicamente Foden no desapareció totalmente del terreno, pero sin alarde alguno. Totalmente fuera del partido, y tras la amarilla a Cole, bastante hizo Inglaterra con evitar que se moviera más en su contra el 6-3 del marcador. El desconcierto era grande, sobre todo en Lawes, que se excedió en una durísima embestida a Ledesma (poco después de arrollar a Tiesi), ya con el hooker argentino placado y fuera del campo. Podría haberle costado cara la acción en términos disciplinarios.
El inicio de la segunda parte siguió la misma línea: intensidad eléctrica de los Pumas, total desconcentración inglesa, lo que se tradujo en un breakdown peligroso de Martín Rodríguez que casi llega a la línea de marca, en una jugada que acaba en penalty para el 9-3 de los Pumas en el momento en que acaba su superioridad numérica. El desastre se prolongó en el mismo Wilko, nefasto ayer (su porcentaje de tiro fue un raquítico 3 de 8, indigno del mejor pateador del mundo tras Dan Carter), que erró tres tiros a palos seguidos que, a mi juicio, deberían haber sido lanzamientos al line out (me parece increíble el conservadurismo inglés con 3-9 en contra y pasado el minuto 50). Sólo la salida del grandioso (cuando está fino) Ben Youngs permitió una perspectiva optimista, pues el medio scrum imprimió un mayor ritmo y un criterio más fino para distribuir el oval. De repente, incluso la delantera inglesa fue a más, superando claramente a la argentina en los scrums, y el ensayo acabó llegando tras una salida de line out que finalizó, cómo no, el propio Youngs, tras zafarse de la defensa de los Pumas. Youngs es un jugador que hace fácil lo que para otros es misión imposible, y no tengo dudas de que otra dinámica habría tenido el partido para Inglaterra si el jugador de Leicester hubiera salido de inicio, o al menos tras el descanso. Wilko, ahora sí, cerró el marcador con la transformación y un penalty, pero en el rush final los argentinos, cuando ya nadie lo esperaba, volvieron a llevar a los ingleses al borde del colapso, con varias acometidas envenenadas que no alcanzaron el ensayo redentor por poco. Victoria rácana, miserable, inmerecida para el equipo de Johnno. Eso sí, mejor que estas imágenes se den al inicio y no al final del torneo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Buen artículo de Ben Dirs en la BBC: http://www.bbc.co.uk/blogs/bendirs/2011/09/disfunctional_england_in_need.html
ResponderEliminarEl comportamiento de los Pumas me ha parecido heroico, en especial su delantera titular (los pilieres reservas no tuvieron el mismo nivel). Lo ha tenido muy cerca. Dicho esto, el Rugby cerrado que práctica, calcado del anterior mundial, no es muy vistoso para el espectador.
ResponderEliminarA partir de ahora comienza su mundial y veremos si como ayer, dejándolo todo a la delantera, le es suficiente. Creo que tiene una línea de 3/4 que ha dado algún fogonazo brillante, de lo que pueden llegar a dar.
A los ingleses les he visto en la linea de lo que ha sido su último año: con falta de confianza, con un entrenador que no acierta ni cuando rectifica.
El cambio de medio de melé fue crucial para ellos.
Por último lo de silbar cuando se tira a palos, o la ola futbolera, son los daños colaterales de la globalización del Rugby.
Saludos
En nombre de la Rosa.
ResponderEliminarEs usted siempre especialmente duro con Inglaterra.
Debe ser su selección favorita.
Sí, en el cambio de primera línea Inglaterra salió claramente ganando, porque barrió el scrum de los Pumas en los últimos 20 minutos. Siguen teniendo el problema del nulo fondo de armario y de un juego limitado. Pero creen en lo que tienen como si fueran fanáticos convencidos. De los backs, me gustan Agulla y Martín Rodríguez, pero sin el Mago de apertura este equipo no es el mismo.
ResponderEliminarTambién de acuerdo con el tema de los silbidos. Las normas del rugby ya sólo se respetan en las islas británicas y sobre todo en el VI Naciones, pues en los mundiales todo se desmadra para peor.
John Bull, acierta usted. Ya decía Fellini (contestando a los que lo acusaban de misógino) que quien no critica a las mujeres es porque no las quiere. En el rugby respeto a todo el mundo, y agradezco un buen partido lo hagan los All Blacks o Rumanía, pero hay tres selecciones por la que siento algo más de interés: Sudáfrica, Gales y, por delante de ambas, Inglaterra. Tiene que ver, no lo oculto, con un tumor british que me ha salido desde hace un tiempo (de ahí lo del cricket, también).
saludos