Escocia se redime

Como no he visto el Gales-Italia (de los transalpinos nunca veo partidos enteros) y todavía tengo pendiente el Francia-Inglaterra, sólo me queda hablar de la inesperada victoria de Escocia en Dublín, en lo que fue la despedida de la selección verde del Croke Park. Victoria inesperada porque nadie la tenía presente en sus cálculos (servidor incluido), aunque al menos en mi caso fue celebrada porque no era de justicia que los del cardo acabaran el torneo sin ninguna victoria. Si en Cardiff se habían marcado un partidazo que únicamente requirió de una buena finalización que no se tuvo, en este caso el partido completo mantuvo un gran nivel y continuidad. Los de Andy Robinson (por cierto, más tranquilo que en partidos anteriores) nunca perdieron la concentración, manteniendo un nivel defensivo muy poderoso, e incluso anotando algún ensayo, punto débil de los caledonios. En pocos ámbitos del juego salieron derrotados: ni en tiro a palos (Parks estuvo mucho mejor que Sexton), melé, rucks o sobre todo line outs (especialidad en la que les robaron varios lanzamientos a los irlandeses). Súmese a esto que Morrison y Southwell se marcaron un gran partido en los tres cuartos, que Euan Murray es un prop de talla internacional y que Johnnie Beattie se está convirtiendo en uno de los mejores nº 8 del continente. Su ensayo, llevándose por delante la acometida de tres irlandeses, deja una buena muestra de ello. Y qué decir de Parks, un jugador que ha estado en el limbo más de un año, tras ser descartado por Hadden y al principio ninguneado por Robinson, para volver a demostrar que es a día de hoy el mejor apertura con que cuenta Escocia. Ha jugado un VI Naciones muy inspirado, que por algo en 3 de sus 5 partidos ha sido nombrado Man of the Match, casi nada.

Por el lado irlandés, decepción absoluta. Incluso mayor que tras su derrota en París. Les faltó todo, especialmente intensidad y concentración, y tal vez les sobró cierta suficiencia, un rasgo que en rugby se paga con creces. En algunos momentos parecía que acabarían dándole la vuelta al marcador, pues su capacidad ofensiva iba apuntando detalles, pero la fuerte defensa de los escoceses mantuvo el fuerte visitante en pie. Mención especial, en el capítulo de críticas, para el joven Sexton, que si bien es mejor en defensa que O'Gara (aunque cualquiera lo es...) y en juego a la mano muestra un talento indiscutible (como se evidenció en el primer ensayo local, aunque su pase a O'Driscoll sea un claro forward pass), con el pie ha tenido un VI Naciones espantoso. En un momento del partido de ayer la BBC ofreció una estadística sangrante, en la que Sexton era el octavo pateador del torneo, con cerca del 30 % de efectividad, que es un registro auténticamente desastroso. Si no recuerdo mal, se quedó en 6 conversiones de 16 intentos. La cruz, no muy lejos: el mismo O'Gara, con un inmaculado 100 % (10 de 10). El problema de Irlanda es que, a diferencia de otros equipos, no cuenta con otros especialistas que el apertura para el tiro a palos, así que, salvo que se reconvierta a Sexton en centro, es difícil que ambos jugadores puedan estar ambos en el 15 titular. Pero este no es ahora mismo el único problema que tiene Kidney.